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Las tropas de Gadafi se retiran a las afueras de Misrata

Varios residentes han confirmado este lunes que las tropas leales al líder libio, Muamar Gadafi, se han retirado desde la céntrica calle de Trípoli a las afueras de Misrata, desde donde han perpetrado la última ofensiva durante esta madrugada que ha causado más de 30 muertos y unos 60 heridos.

La retirada es cierta, pero algunos residentes son escépticos y han mostrado sus dudas sobre el propósito de este movimiento. En cuestión de horas, Misrata ha sido blanco de los ataques más intensos ejecutados hasta ahora y que ha alzado a la ciudad como emblema de resistencia a las acometidas de Gadafi.

Al menos 30 personas han perdido la vida y 60 han resultado heridos tras el ataque de esta noche, según ha asegurado Ahmed al Qadi, un ingeniero que trabaja para una emisora de radio disidente en Misrata. Según han afirmado fuentes médicas, más de 48 personas han muerto durante este fin de semana. Un portavoz de los rebeldes ha señalado que la cifra de fallecidos es aún mayor.

Los ciudadanos han salido de sus casas al amanecer y a su paso han encontrado un territorio devastado por los intensos bombardeos procedentes de los carros de combate y los cohetes lanzados por las fuerzas de Gadafi.

Tres cuerpos han sido incinerados tras ser reconocidos y un niño de diez años ha muerto mientras dormía debido a los ataques nocturnos. Muchos de los proyectiles han caído en descampados, pero han cesado al aparecer la aviación de la OTAN.

Asimismo, Mohamed Ibrahim, un residente cuya prima falleció durante el fin de semana, ha asegurado que "los cadáveres de tropas de Gadafi se encuentran en cualquier parte, en las calles y en los edificios". "No podemos determinar cuántos hay, pero algunos llevan ahí durante días", ha añadido durante una conversación telefónica.

Por otra parte, los doctores se encuentran sobrepasados por las decenas de heridos hacinados en el único hospital de Misrata. Un portavoz rebelde, Sami, ha sostenido que la situación humanitaria está empeorando rápidamente.

"Esto es indescriptible, el hospital es muy pequeño y está lleno de personas heridas, muchos de ellos en condiciones críticas", ha añadido por teléfono. "La cantidad de comida disponible en la ciudad también está descendiendo", ha asegurado Sami, que ha subrayado que la situación en Misrata "se está deteriorando debido al asedio".