Penúltimos Juegos por la tele por Alfredo Menéndez

Hace como un par de siglos en Singapur – qué lejos queda– nos tocó oír aquello de: «To the city of London». Después, en Copenhague, la elegida fue Río y Madrid se volvió a quedar compuesta y sin aros. Y ahora en esta semana en la que arrancan los Juegos Olímpicos de Londres volvemos a imaginar cómo podrían ser unos juegos en la capital: en el 2020.

Con respecto a Londres saldríamos ganando en lo que tiene que ver con el tiempo, porque si alguien pensaba que iba a hacer sol tropical sobre el Támesis en verano es que no conoce la ciudad o no conoce el trópico. Madrid de sol va sobrada – de más incluso – así que en ese aspecto, que además es gratis, no hay problema.

El problema es con todo lo que no es gratis: el presupuesto y la inversión en infraestructuras. De aquí a septiembre del año que viene en Buenos Aires – ya sólo quedan 14 meses – veremos todo tipo de estrategias externas poniendo en duda la viabilidad económica del proyecto. Y seguramente con esa habilidad tan española que tenemos pondremos la lupa sobre nuestros defectos y echaremos sordina sobre los aciertos para que nadie repare en ellos. Los Juegos de Londres pueden ser los penúltimos que veamos por la tele. Porque los Juegos XXXII Olimpiada a los que aspira Madrid, con un poco de suerte, ya los veremos en casa.