Operación Lezo

El Gobierno de los fieles

Tras la toma de posesión, González reestructurará el Ejecutivo. No ha descartado separar Portavocía y Vicepresidencia. Lasquetty y Victoria son los dos «candidatos» que cumplen con sus tres requisitos 

Javier Fernández-Lasquetty (izqda) conversa con Salvador Victoria en su toma de posesión como consejeros de Sanidad y Asuntos Sociales, tras las elecciones de 2011
Javier Fernández-Lasquetty (izqda) conversa con Salvador Victoria en su toma de posesión como consejeros de Sanidad y Asuntos Sociales, tras las elecciones de 2011larazon

MADRID- Desde el pasado lunes, cuando Esperanza Aguirre presentó su dimisión, el tiempo vuela para Ignacio González. De un día para otro ha asumido el peso de gobernar seis millones y medio de madrileños. Cuatro días después y aunque el Gabinete de Aguirre sigue trabajando en la Puerta del Sol, a cada minuto se le hace más urgente la necesidad de un vicepresidente en el que se pueda apoyar. El próximo miércoles será investido como cuarto presidente de la Comunidad después de pronunciar un discurso que preparaba ayer. El siguiente paso será definir el Gobierno con el que gestionará la región los próximos tres años.

No será un ascenso jerarquizado, sino una remodelación de Gobierno en toda regla sobre la que no faltan quinielas. En concreto, se manejan dos opciones. La primera supone que uno de los consejeros asuma todos sus cargos. La segunda pasa por repartir sus competencias entre los existentes y hacer un «fichaje» que sustituya al consejero que asuma la vicepresidencia, la cartera con más peso. La pregunta está en si realmente hay alguien que pueda asumir todas las competencias que él acumula.

Su conocida capacidad de trabajo y coordinación y, sobre todo, la confianza casi en exclusiva que ha tenido Aguirre en él, le han llevado a convertirse en vicepresidente, portavoz, consejero de Cultura y Deportes, presidente del Canal de Isabel II, vicepresidente del Comité Ejecutivo de Ifema y presidente del Consejo de Asuntos Taurinos del Ejecutivo regional. Además, tiene las competencias regionales de las relaciones con Asamblea y en materia audivisual.

Fuentes cercanas al presidente en funciones apostaban ayer por quepodría recuperar las Consejerías de Cultura, Deportes –eliminadas en 2009 con la salida de Santiago Fisas y Alberto López-Viejo– y a éstas añadirles la Dirección General de Turismo, que acualmente depende de Economía y Hacienda. Sin embargo, esta opción fue rechazada ayer desde la Puerta del Sol puesto que requeriría crear toda una nueva estructura administrativa, con los costes que ello supone.

Lo más probable, coinciden las fuentes consultadas tanto en el partido como en Sol, es que González reparta entre los actuales consejeros sus competencias y haga las incorporaciones justas. Nadie descarta la posibilidad de que el nuevo presidente regional elimine la portavocía y recupere el «estilo Gallardón», que durante sus ocho años al frente de la Comunidad nunca tuvo un portavoz, sólo un vicepresidente, de tal manera que era él quien daba la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, algo que González lleva haciendo los últimos nueve años. Esta opción le permtiría estar más expuesto a los medios, lo que le daría imagen pero también podría desgastarle.

La estructura por la que más se apuesta en los mentideros es por un vicepresidente que podría liberarse tanto de Cultura y Deportes como de la Portavocía. Para estos puestos ya suenan muchos nombres. Uno de los que ellos es el de Lucía Figar. Algunos ya han apuntado a que podría ser la número dos de González para «contentar a Génova». Sin embargo, en este momento, y al menos los próximos tres años (hasta las elecciones de 2015), Ignacio González tiene «todo el respaldo» del partido, tal y como declaró ayer en Los Desayunos Autonómicos de LA RAZÓN, la secretaria general del PP, Mª Dolores de Cospedal.

Y la única «batalla» que hay en el horizonte entre Génova y Sol es la de la sucesión de Aguirre al frente del partido en Madrid; una guerra que no se libraría hasta que ella no salga, y esto, dijo, «no es inminente». Además, en la actualidad, Figar es portavoz del partido en Madrid y «veterana» en la cartera de Educación, motivos por los que su ayer nombre iba «cayendo» de las quinielas.

Las cualidades del «número dos»
Los diputados consultados por este periódico apuntan a dos hombres: Javier Fernández-Lasquetty y Salvador Victoria. Además añaden: «No tendría por qué elegir». Es decir, uno podría ser portavoz –además de consejero– y el otro dejar su cartera para dedicarse por completo a la labor de «número dos», junto a alguno de los cargos, como el de presidente del Canal o Asuntos Taurinos. Los dos reúnen el perfil de los colaboradores que «encajarían» con el nuevo presidente porque «tienen los tres requisitos indispensables para el nuevo jefe del Ejecutivo autonómico: preparación, capacidad de trabajo y discrección», explican desde Génova.
De hecho, Victoria ya fue viceconsejero de la Vicepresidencia, es decir que en su caso, sería cuestión de «ascender» a su ex número dos al que ya «premió» con la Consejería de Asuntos Sociales. Además, añaden, «los dos son personas muy destacadas en el partido». Puestos a pensar en nuevas incorporaciones, los nombres que más suenan son Borja Sarasola (actual mano derecha de González en la Vicepresidencia) o los ex alcaldes de Móstoles y Alcalá (Esteban Parro y Bartolomé González respectivamente) e incluso, actuales como el regidor de Alcorcón, David Pérez. De los tres, González es el favorito.

 

Javier Fernández-Lasquetty

Un hombre de Aznar de la máxima confianza de González

La última luz en apagarse en la Consejería de Sanidad es casi siempre la del despacho de Javier Fernández Lasquetty. Es, según su círculo cercano, un trabajador inagotable. Afiliado al PP a los 16 años, este «hombre de Aznar» –trabajó junto a él en La Moncloa y en 2004 el ex presidente le eligió como su número dos en FAES– ha hecho de la exigencia y de la eficacia en la gestión los dos pilares de una carrera política que podría dar ahora un nuevo paso hacia adelante. De la máxima confianza de Ignacio González, es habitual verle sentado en las reuniones junto al presidente en funciones. Lector compulsivo y aficionado al golf, Lasquetty ha desempeñado responsabilidades en la política municipal, autonómica y nacional. Aguirre le encomendó en 2007 la consejería de Inmigración y en esta Legislatura, la de Sanidad, con la misión de apagar el fuego con los sindicatos sanitarios.

Salvador Victoria

El «fontanero» regional que corre maratones

Su discreción y su buen hacer durante ocho años como secretario del Consejo de Gobierno y como número dos de González en la vicepresidencia le valieron que Aguirre pensara en él tras las elecciones de 2011. Entonces fue nombrado consejero de Asuntos Sociales, cargo que le ha permitido convertirse en una de las caras amables del Ejecutivo. Responsable desde 2008 del entramado jurídico del PP de Madrid, en la actualidad es también el presidente de su Comité Electoral. Abogado de profesión, Victoria fue el número uno en las oposiciones al cuerpo de Letrados de la CAM. Su capacidad de estudio y de trabajo se encarga de transmitirla a su equipo. Sus perfiles en Twitter y en Facebook le acreditan, además, como uno de los políticos más activos en el mundo 2.0. Otra de sus grandes pasiones es el deporte, especialmente el maratón, para el que se entrena a conciencia a diario.