Zoido defenderá la Torre Pelli ante la Unesco con el apoyo de «varios países»

Sevilla- El alcalde, Juan Ignacio Zoido, no estará solo hoy en San Petersburgo –donde se celebra el comité de patrimonio mundial de la Unesco– defendiendo la Torre Pelli y la consideración de Patrimonio de la Humanidad de la Catedral, el Real Alcázar y el Archivo de Indias. Ante la posibilidad de que la ciudad sea incluida en la «lista negra» del organismo internacional, el regidor anunció que se presentará en la ciudad rusa con una propuesta «pendiente de consensuar con distintos países que ya se han comprometido a apoyarla», con el objetivo de hacer presión y evitar que la capital hispalense se incluya en la lista de bienes en peligro.
Zoido, que intervino en la presentación del Centro de Servicios Integrados para la mejora del software de la Cámara de Comercio, recordó que España no forma parte del comité, pero sí hay países que se han comprometido a prestar su ayuda. «Espero que lo podamos conseguir, puesto que el apoyo del Gobierno de España está siendo muy firme», dijo el regidor, que contrapuso este compromiso con el de la Junta, que «ya se ha visto su actitud».
No obstante, garantizó que se defenderá «muy bien» la ciudad y «con todo tipo de argumentos», indicando que la torre está «fuera de la zona de amortiguamiento, a 1,7 metros exactamente». «Nuestro compromiso con los principios de la Unesco son ratificados y creemos en la organización, así que queremos que nos dé un tratamiento igualitario en el comité», advirtió.
Además el regidor recordó que ha tenido ocasión de contactar con 12 de los 21 embajadores de la Unesco en una jornada «frenética» y apostó por que «la patrimonialidad de los monumentos pueda seguir creciendo».
Por su parte, la Junta también se pronunció en este debate ante la inminencia del comité. El consejero de Cultura, Luciano Alonso, confió en que la Unesco sea «generosa» y «respete» la declaración de Patrimonio de la Humanidad. «Lamento esta polémica porque Sevilla es mucha ciudad para ponerla en duda», subrayó Alonso, quien destacó que «sería doloroso» que se incluyera en la «lista negra». También aseguró que el cambio de opinión del alcalde «no fue muy acertado» y que la Unesco sabe «perfectamente» que los tres monumentos «no sufren culturalmente».