Jorge Fin: el fin del miedo

MADRID- El pasado martes la Galería Gurriarán inauguró la exposición de Jorge Fin «Sin miedo». Como si de un cuento de los hermanos Grimm se tratara, este artista, que nos tiene acostumbrados al onírico mundo de las nubes, nos muestra su nuevo trabajo. Parte desde las reflexiones del humanista portugués Gaspar Frutuoso en su obra «Saudades da terra», donde en un diálogo la Verdad muestra a la Fama su estandarte: «No creas todo lo que oyes. No digas todo lo que sabes. No desees todo lo que ves». El pintor dedica algunas obras a las tres frases de este lema, y en esa idea de la superación del miedo, recurre a otras figuras como Ícaro tras su caída o la exultante forma en que Cervantes da salida de su casa por primera vez a Don Quijote, «salió al campo con grandísimo contento», transmutado el hidalgo en un pequeño caracol; o autorretratándose como un conejo que vuela valiente en el día y la noche a pesar de su fragilidad.

Si para Jorge Fin el paisaje es un sentimiento, éste se plasma en sus lienzos, ahondando en la insignificancia de la condición humana ante el envolvente cielo. Apenas hay nada que hacer para salvarse ,pero aún cabe la osadía de enfrentarse a la realidad sin miedo, porque el miedo paraliza y es estéril. Jorge es el caballero de las tablas redondas donde sus óleos nos hacen levantar la mirada. «No mires abajo, levanta los ojos», reza una de sus obras.

Aunque en esta ocasión las nubes no son protagonistas, no deja de ser importante el cielo, y es que, como decía en la greguería de la Serna, «de tanto mirar al cielo le salió una nube en el ojo al poeta». En la obra del pintor el sentimiento herido de paz quita miedo al miedo, no inventemos éste para justificar el peligro.