Estados Unidos

Votar por los pies por Rafael Ortiz Calzadilla

La Razón
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Hace unos días recibí una llamada desde Suecia de un amigo preguntándome si era seguro mantener una cuenta bancaria en España ante las noticias sobre la situación económica española. Incluso se planteaba dejar de pasar los inviernos en España para trasladarse a otro país con menos incógnitas económicas. Votar con los pies es un fenómeno que surgió en los Estados Unidos con la migración interna y las decisiones de vivir en el Estado que más bienestar ofrecía. Manifiesta la opinión del ciudadano sobre la gestión de sus gobernantes en función de la calidad de los servicios públicos recibidos y de la carga fiscal soportada. La votación con los pies es un proceso silencioso que se manifiesta cuando los ciudadanos y las empresas localizan su capital o su actividad en territorios que les resultan más atractivos. Charles Tiebout, economista norteamericano, observó cómo la descentralización fiscal producía diferencias impositivas entre territorios y los ciudadanos trasladaban su residencia a los de menor carga fiscal. Su tesis sobre el voto con los pies supuso una llamada de atención importante para los gobernantes contribuyendo a dotar de mayor rigor a los procesos electorales superando planteamientos ideológicos ayunos de consistencia.

El voto con los pies se está produciendo también en la Unión Europea que abandonó sus objetivos de armonización fiscal existiendo un alto grado de competitividad entre sus estados miembros. Competitividad que se manifiesta en tipos impositivos muy diferentes en todos los tributos, incluido el IVA, y formas de financiación del gasto social muy distintas. No será tarea fácil la pretendida unidad fiscal europea más allá de imponer indicadores de déficit y endeudamiento público. Si ya resulta difícil la unidad fiscal en España, más aún será lograrlo en la Unión Europea. La emigración de capitales y ciudadanos por motivos fiscales; la deslocalización de empresas hacia países emergentes; los efectos económicos de financiar la Seguridad Social con cotizaciones o con IVA; el efecto frontera en territorios limítrofes con distinta fiscalidad; la aparición de paraísos fiscales internos; son temas en los que se manifiesta la votación con los pies. De ahí la conveniencia de introducir un análisis sosegado y riguroso de fenómenos como éste en el debate político para no quedarnos en meros planteamientos ideológicos respetables pero sesgados que enrarecen el clima psicológico tan perjudicial en momentos de crisis.

 

Rafael Ortiz Calzadilla
Catedrático de Hacienda Pública y Derecho Fiscal de la UCM