El Congreso pide que venga Draghi

Madrid- Si el presidente del BCE, Mario Draghi, ha explicado a los parlamentarios alemanes la situación económica de Europa en una reciente reunión, lo lógico es que también rinda cuentas a los diputados de uno de los países clave en esta crisis, España. Eso piensan, al menos, sus señorías, que ayer acordaron que el presidente del Congreso, Jesús Posada, se dirija a Draghi para que mantenga un encuentro con diputados españoles.

La decisión se tomó en la Junta de Portavoces del Congreso, según informó a su término la portavoz del Grupo Socialista, Soraya Rodríguez. No obstante, los términos formales de la invitación a Draghi se van a concretar en un futuro encuentro de los portavoces parlamentarios.
Precisamente, ha sido la representante del PSOE la que propuso la conveniencia de que el Congreso solicite una reunión con el presidente del BCE, una iniciativa que fue apoyada por el resto de grupos. Para la portavoz socialista, es oportuno que Draghi exponga ante los parlamentarios «los retos que tiene que afrontar la zona euro» y también que «escuche» la posición de los distintos partidos con presencia en la Cámara Baja. «Igual que puede debatir con los alemanes, lo puede hacer también con los españoles», dijo Rodríguez, subrayando que la opinión de Draghi es importante puesto que el BCE «tiene mucho que decir» acerca de la situación de España, sobre cuya economía «pesa la espada de Damocles de la solicitud de un futuro rescate».

A esta misma cuestión se refirió su homólogo del PP, Alfonso Alonso, quien juzgó «interesante» y «muy útil» la idea del PSOE de escuchar del propio Draghi la política y las intenciones del BCE, algo de lo que, según remarcó, depende «mucho» el futuro de España. «Parece mentira que yo lo diga, pero es muy oportuna la iniciativa del PSOE y la apoyamos porque es interesante para la opinión pública y para el Parlamento que podamos hablar en la sede de la soberanía popular de algo tan central para la política española.

Los sueldos de la banca, a examen
La Comisión de Economía del Congreso de los Diputados aprobó ayer la ley de reestructuración de entidades financieras que incluye el encargo al Banco de España de un informe sobre los sueldos en las entidades intervenidas. Además, deberá fijar en cuatro meses un nuevo modelo retributivo para directivos de la banca.