La Cámara de Comercio pide recortes públicos ante los excesos del tripartito

BARCELONA- La Cámara de Comercio de Barcelona no ha querido mantenerse al margen de los recortes de la Generalitat y ayer aportó su granito de arena. A su juicio, el Govern podría aliviar las arcas públicas con una reducción del 15 por ciento de las empresas públicas dependientes de la administrción catalana. Así, conseguiría recortar 3.000 millones de euros del déficit, un 30 por ciento. No en vano, en los últimos cuatro años del tripartito, se pasó de 108 a 224 entidades dependientes de la administración.

Así las cosas, el presidente de la Cámara de Comercio, Miquel Valls, apuntó que durante los últimos cuatro años «la plantilla de la Generalitat ha crecido un 20,8 por ciento y la población catalana lo ha hecho en un 5,3 por ciento». En la actualidad, estas entidades suponen el 42 por ciento del personal y el 56 por ciento del gasto de la Generalitat. «Son como miniestructuras paralelas y poco eficientes», señaló Valls.

Ante este baile de cifras, Valls explicó que rebajar en un 15 por ciento el tamaño del sector público, así como reestructurarlo reduciría por sí solo los mencionados 3.000 millones los gastos de la Generalitat. Y, para eso, han propuesto un plan de ordenación con la vista puesta en el 2014, que «no quiere decir suprimirlas estrictamente», sino que en algunos casos podrían unificarse o reestructurar sus funciones para evitar duplicidades existentes. «Son tiempos difíciles para el sector público. Ahora toca hacer sacrificios y toca reducir velocidad para no gastar tanta gasolina. Han vivido un período de excesos y falta de control» en el pasado, que necesita ser corregido, apuntó.

Según la Cámara, la inversión pública debe mantener un ritmo intenso y, por lo tanto, los recortes no pueden rebasar el 5 por ciento, lo que, a su entender, permitiría realizar este año actuaciones por unos 5.400 millones, el 2,7 por ciento.

Respecto al gasto corriente, la Cámara propone un ajuste de un 5 por ciento de los gastos de personal, lo que contribuiría en un 11 por ciento a la reducción del déficit, a través de la congelación del sueldo de todo el personal público y sustituyendo sólo el 10 por ciento de las bajas (excepto en educación y sanidad).

A medio plazo, este organismo cree que habría que vincular los aumentos salariales en el sector público a los aumentos de la productividad y hacer que el aumento del personal contratado sea proporcional al del aumento de la población.La propuesta de la Cámara para reducir el déficit de la Generalitat incluye también una reducción del 20 por ciento del capítulo de compras de bienes y servicios, como el gasto en alquileres que, según denunció, se ha triplicado en las empresas públicas de la Generalitat.

La Cámara de Comercio de Barcelona augura que la economía catalana crecerá un 0,8 por ciento en 2011, gracias al buen comportamiento de las exportaciones, la inversión en bienes de equipo y el turismo.

Esta previsión parte del análisis de los resultados del Indicador de Clima Empresarial de Cataluña que elabora la misma Cámara de Comercio de Barcelona en colaboración con el grupo de investigación en economía aplicada de la Universidad de Barcelona (UB).

El estudio confirma que la construcción continuará cayendo en este primer trimestre del año.
 

Por el contrario, el sector servicios crecerá, mientras que el sector industrial se mantendrá estable.

Pese a estos brotes verdes, a la Cámara de Comercio de Barcelona, le preocupa cómo puede llegar a afectar a la evolución del Producto Interior Bruto (PIB) catalán, el incremento de los costes de producción debido al aumento del precio del petróleo y las dificultades de financiación de las empresas, en especial de todas aquéllas que se dedican al sector de la construcción.