Premios Goya

González-Macho: «No somos la oposición a nadie»

Nunca la presidencia de la Academia estuvo tan disputada. En un principio, parecía que la candidatura de Bigas Luna, acompañado de la actriz Leonor Watling y el director de producción Yousaf Bokhari, iba a ser la única opción. Pero, poco a poco, comenzaron a surgir las alternativas.

 
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Primero, la de la actriz, directora, guionista y productora Azucena de la Fuente. Y, ayer, la distribución entró en escena. Enrique González-Macho, propietario de Alta Films, anunció a la Prensa su candidatura con una terna que completan la actriz Marta Etura y la directora Judith Collel. «No somos una candidatura de oposición a nadie. Me parece maravilloso que existan otras», explicó González-Macho, quien, sin embargo, hace un mes habló de la existencia de un lobby catalán en la industria. También reconoció que «mi handicap es que soy distribuidor». De hecho, en toda la historia de la institución, no ha habido ningún presidente que no fuera actor o director.

Creadores contra industria

Con este panorama, también atípico, ya que sólo Ángeles González-Sinde tuvo oposición en las elecciones a la presidencia, la institución podría dividirse entre «creadores» e «industria». El respaldo del propietario de los cines Renoir es importante, pero numéricamente inferior al de Bigas Luna. Por su parte, el director tendría el apoyo de la mayoría de los actores. No desveló mucho el también productor sobre sus líneas maestras, pero sí recalcó la idea de «hacer de la Academia un lugar profundamente apolítico».

El cine en internet se convirtió una vez más en el tema que podría dividir a los 1.200 académicos en el momento de la votación. En el seno de la institución hubo cierto descontento por la opinión que Bigas Luna tiene sobre las descargas de películas en la red, demasiado laxa para algunos de sus miembros. En este sentido, González-Macho recordó que «la Academia no es un órgano legislativo, sino un lugar de debate y de recepción de sensibilidades. Además, hay que respetar todas las opiniones al respecto». Sobre este tema fue un poco más allá Marta Etura, quien concretó que «estamos, por supuesto, a favor de las nuevas tecnologías, pero siempre que se respeten los derechos de los creadores».

 A pesar de los tiempos revueltos por los que ha pasado la Academia, González-Macho la considera «un lugar tranquilo que lo ha asumido todo muy bien», en referencia a la polémica dimisión del presidente y las reacciones del sector. Quién iba a decir que después de lo ocurrido durante los últimos meses iba a haber tantos interesados en entrar en el juego.