Castilla y León

Las exportaciones tiran de la economía regional lastrada por la construcción

 
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Las exportaciones tiraron de la economía castellano y leonesa en el segundo trimestre de este año. Un periodo en el que creció un 0,6 por ciento, a pesar de que la construcción sigue lastrando ese avance, porque, tal como destacaba la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, «no hay inversión» en ese sector.

En este marco, y teniendo en cuenta que el gasto de las administraciones públicas también se encontraba en cifras negativas en el periodo comprendido entre abril y junio, como consecuencia de las medidas de austeridad impuestas, se da un «estancamiento de la economía», según destacó la consejera, quien no se aventuró a pronosticar si se cumplirán las previsiones presupuestarias de un crecimiento del 1 por ciento en este ejercicio.

No obstante, desde la perspectiva de la oferta, todos los sectores estuvieron en positivo, con la excepción de la construcción y los servicios de mercado. Hubo aceleración del ritmo de crecimiento de la actividad productiva en el sector primario -agricultura y ganadería- y de la industria energética, frente a la ralentización de la manufacturera y los servicios de mercado.

El futuro en la construcción
No fue especialmente optimista la consejera Pilar del Olmo con respecto al futuro de la construcción, al señalar que «no nos da ninguna alegría, al contrario, no sé si habrá tocado aún fondo».
En el campo, el valor añadido bruto creció un 4,6 por ciento, frente al 1,5 por ciento del trimestre precedente, y el último avance disponible de producción agraria indica un crecimiento de producción de los principales cultivos con respecto al año pasado. En la ganadería también se avanza, por el incremento de la producción cárnica.

La Energía, clave
En cuanto a la industria, las ramas energéticas crecieron un 5,6 por ciento interanual por el tirón en la producción y distribución de electricidad, gas y agua. La construcción retrocedió un 6,7 por ciento, mientras que los servicios -que suponen el 70% de la economía autonómica- moderaron su crecimiento hasta el 0,4 por ciento, como consecuencia del frenazo dado por los dependientes de las administraciones públicas.

Con respecto a la demanda, la interna sigue en caída libre, con un retroceso del 0,9 por ciento, mientras que la contribución positiva del sector exterior se fijó en el 1,5 por ciento.
Y es que el gasto en consumo final de hogares y administraciones se desaceleró, con un avance del 0,6 por ciento de los primeros por una caída del 0,4 por ciento en el segundo.

En cuanto al empleo, medido en puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, se desplomó un 0,4 por ciento, aunque presentó un mejor comportamiento que entre enero y marzo, cuando el retroceso fue del 1,4 por ciento. Por sectores, creció en el primario y en los servicios, mientras que atenuó su ritmo contractivo en ámbitos clave para el crecimiento regional. En el constructor, la caída de puestos de trabajo, con respecto al 2010, es del 11,5 por ciento interanual, mientras que la Industria, se contrajo un 1,5 por ciento, frente al 7,1 por ciento del primer trimestre de este año.

Pilar del Olmo explicó que la elevada tasa de paro en Castilla y León -también en España- es «una rémora para el crecimiento económico», para después pedir medidas encaminadas a la creación de empleo, a la par que definió como «clave» la reestructuración del sector financiero, de cara a que las empresas puedan tener un mayor acceso al crédito.