Infraestructuras

Botella pone a raya la mendicidad y la prostitución

El consistorio prepara una ordenanza para regular las actividades en la vía pública. Habrá nuevas multas para el «top manta» y el vandalismo

La alcaldesa, Ana Botella, anunció ayer la elaboración de la nueva ordenanza de convivencia ciudadana
La alcaldesa, Ana Botella, anunció ayer la elaboración de la nueva ordenanza de convivencia ciudadanalarazon

MADRID- En el primer semestre de 2013, el consistorio madrileño presentará una nueva ordenanza de convivencia ciudadana. La norma quiere reunir en un único texto las cuestiones básicas que permitan que los vecinos de la capital desarrollen sus actividades al aire libre, disfrutando de los espacios públicos con civismo. Además, la ordenanza, que se elaborará con la participación de todos los grupos políticos presentes en el Ayuntamiento de Madrid, abordará cuestiones tan delicadas como la mendicidad o la prostitución.

Respecto a esta cuestión, la alcaldesa de la capital, Ana Botella, recordó ayer que su planteamiento, desde que llegó al área de Gobierno de Asuntos Sociales en 2003, es seguir el modelo sueco: «Que sigue el principio de que no se puede perseguir a la mujer o al hombre por el ejercicio de la prostitución, porque en un 90 por ciento no son libres; que de alguna forma hay que disuadir al cliente y hay que perseguir al proxeneta».

Botella, que anunció que en el próximo pleno se presentará una iniciativa con el acuerdo de todos los grupos municipales –PP, PSOE, IU y UPyD–, apuntó a que «en el tema de la prostitución, cualquier acción que se lleve a efecto sería mucho más eficaz si existiera una legislación nacional». Al respecto, la nueva ordenanza de convivencia afectará a «normas de conducta en el espacio público» como «las de ofrecimiento y demanda de servicios sexuales» y «las que adopten formas de mendicidad».

En este sentido, la delegada de Familia y Asuntos Sociales, Dolores Navarro, matizó que el objetivo es dotar a la Administración municipal de una nueva herramienta que facilite la intervención de los distintos servicios municipales en el espacio público, «siempre poniendo por delante las medidas sociales y educativas de reparación de daño, como las sustitutorias de trabajo comunitario, frente a las coercitivas y sancionadoras».

Prohibido «rondar»
Otros aspectos que regulará la nueva normativa afectarán a otras actividades incívicas que se realizan en la vía pública como orinar en la calle, el «top manta» y el comercio ambulante de alimentos y bebidas, el botellón, las apuestas o las actitudes vandálicas. Muchas de estas cuestiones ya estaban reguladas por la ordenanza de convivencia de 1.948 (que entre otras cuestiones prohibía las «rondallas») y reformuladas por otra normativa posterior. «El objetivo es refundir en una sola ordenanza lo que ahora está repartido en varias», explicó la alcaldesa. Asimismo, pretende potenciar el turismo y la candidatura olímpica de Madrid 2020.