Baloncesto

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El Madrid no da tono

La Razón
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El Madrid no tiene problemas para seguir en la Liga de Campeones, para ganar la Liga y hasta la Copa del Rey. No hay ningún camino cerrado. Sin embargo, el equipo deberá mejorar su condición física y el entrenador se verá en la obligación de reconsiderar sus planteamientos. Alguien le ha regalado los oídos instándole a jugar con alegría y en cualquier competición lo prudente es tomar precauciones para no verse en situaciones muy apuradas.

El Madrid, pese a los cambios en la plantilla y, consecuentemente, en el equipo, ha variado poco el ritmo. Sigue manejando el balón sin prisas y basta enfrentarse a jugadores que recurren a la rapidez en los desplazamientos, que compensa la supuesta inferioridad técnica, para que la inseguridad se adueñe del juego. Lo preocupante en este momento no es que se corra como cuando jugaban Figo, Zidane, Beckham y compañía, sino que algunos de los actuales futbolistas no dan la talla.

La defensa no tiene firmeza en los contragolpes contrarios y se ve desbordada. Marcelo, alabado como el gran sucesor de Roberto Carlos, no encuentra sitio como defensor ni como atacante por la banda. Sergio Ramos, prodigio físico, también acabó fundido en Bremen porque no se controla.

El Madrid, que empató en Murcia y perdió en Bremen, adoleció de mando en el centro del campo. Diarra hay días en que se despista y Guti es tan buen jugador como irregular y obsesionado por el toque de distinción y el lucimiento de peinados y tatuajes. Al equipo le faltó creatividad y sentido defensivo. En estas condiciones es hasta milagroso que Van Nistelrooy pueda marcar un gol. Últimamente, el Madrid se salva por Robinho, el único que inventa y crea peligro y goles. ¿Raúl?