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Gana 126 millones y acude al trabajo por miedo al despido

Gana 126 millones y acude al trabajo por miedo al despido
Gana 126 millones y acude al trabajo por miedo al despidolarazon

La agraciada con el premio de 126 millones de euros del sorteo del Euromillones del pasado viernes es una residente en Mallorca de 25 años que hasta el lunes no supo de su suerte por encontrarse enferma, según informó ayer la página web serviapuestas.es, que le vendió el boleto acertante.Según indica la empresa de venta de lotería en un comunicado, el boleto que correspondió al premio de mayor dotación repartido históricamente en este sorteo fue validado en una administración de la madrileña calle de Alcalá gracias a los acuerdos que suscribe con varios despachos de lotería, si bien su dueña lo había comprado a través de internet.La combinación ganadora del sorteo se supo el pasado viernes, pero la acertante pasó todo el fin de semana sin conocer que lo había ganado y ayer la dirección general de Serviapuestas le comunicó la noticia.Viaje a MadridLa joven declaró que había estado con gripe estos pasados días y por ello no se había enterado del premio. Añadió que, sin conocer aún que era millonaria, decidió acudir por la mañana a trabajar por miedo a perder su puesto ante la situación de crisis económica actual. «El lunes seguía con gripe, pero con la situación de crisis que estamos viviendo, decidí, por miedo a perderlo, que tenía que ir igualmente al trabajo», afirmó la multimillonaria. Ayer, la agraciada viajó a Madrid para reunirse con la dirección general de Serviapuestas, que le informará de cómo actuar en estos casos.La joven explicó que no hizo caso a la notificación del premio que le mandaron por correo electrónico porque pensó que se trataba de publicidad. «Creía que me estaban tomando el pelo cuando recibí la comunicación por internet. Vi el correo y todo estaba en verde, todos los números en color verde. Pensaba que era publicidad para incentivar el juego, estas cosas que suelen llegar al correo». Los planes de esta mallorquina son cambiar su «pequeña casa de Palma por una finca en la que criar caballos. Siempre me han gustado los animales, las cosas sencillas. Ser multimillonaria no estaba en mi pensamiento», dijo.