Pelea en las áreas

MADRID- El Barcelona bate todos los récords. Persigue el de los 107 goles en una temporada del Madrid de Toshack y está a punto de superar el del mejor tridente goleador en un curso. Puskas, Di Stéfano y Del Sol lo mantienen desde el año 61 del siglo pasado. Casi cincuenta años han pasado para que alguien se acerque a los 66 goles que marcaron entre los tres. Casi medio siglo ha pasado hasta que se han juntado Etoo, Messi y Henry. Uno les queda para igualarlos, un gol que le corresponde a Etoo en el reparto. Di Stéfano marcó 21 en aquella temporada, los mismos que ha logrado Messi hasta el momento. Henry ha conseguido ya los 17 de Del Sol. Y a Etoo le falta uno para alcanzar los 28 de Puskas. En esos tres futbolistas ha apoyado Guardiola la fuerza ofensiva de su equipo. Tanto ha confiado en ellos que apenas han quedado minutos para Bojan, una de las mayores esperanzas del fútbol español, ni para Hleb, el extremo que le «robó» el Barça al Arsenal de Wenger. Guardiola ha recuperado a Etoo, al que quería traspasar antes de sentarse en el banquillo, y a Henry. Pep era casi el único que confiaba en el francés, que le ha devuelto la confianza envuelta en goles. Así ha conseguido que no todo empiece y acabe en Messi. «¿Crees que si anulamos a Me ssi estará todo solucionado?», preguntaba Juande Ramos en su conferencia de prensa de ayer. Y después se respondía: «Anular a Messi no garantiza nada». El Madrid no necesita tanto brillo para ganar sus partidos. Lo suyo es cuestión de feé. La que les sobra a Raúl e Higuaín. El argentino marcó contra el Getafe el que puede ser el gol decisivo de la Liga. Es, al menos, el que mantiene vivo a su equipo. Raúl respondió al «Pipita» con tres goles ante el Sevilla. Además, en la segunda vuelta han encontrado un socio en Huntelaar. El holandés ha marcado ocho goles, aunque decisivo sólo fue el que cerró el empate contra el Atlético. A ellos habría que sumarles los cuatro tantos de Van Nistelrooy para completar el tridente madridista durante toda la temporada. Son dos estilos diferentes, la velocidad de movimientos -de los jugadores y de la pelota- del tridente azulgrana y las ganas y la fe de los madridistas. Llegan también de manera diferente al encuentro. Los azulgrana dan sensación de agotamiento. Los madridistas dan la impresión de estar pletóricos. Sobre todo porque su fuerza está en la cabeza y no en las piernas. «Éste es el Real Madrid más goleador de la última década, pese a que dicen que no somos brillantes», se defiende Juande Ramos. Además, Higuaín y Raúl ya han marcado al Barcelona en el bernabéu. Etoo ha marcado al Madrid en su casa, con el Mallorca y con el Barcelona. Henry marcó con el Arsenal. Pero Messi sólo ha marcado en el Camp Nou. Hoy tiene una oportunidad para ser como sus compañeros.