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Rajoy intentará gobernar si consigue más escaños aunque pierda en votos

Rajoy se comprometió durante un encuentro informativo organizado por Europa Press a que no gobernará si no tiene más escaños que José Luis Rodríguez Zapatero, ya que considera que «gana quien obtiene más escaños» en las urnas.
Al ser preguntado sobre las opciones de pactar con otras formaciones políticas, declaró que no cierra la puerta a pactar con formaciones nacionalistas como CiU o PNV, aunque aclaró que en ningún caso pondrá en tela de juicio «los fundamentos de la nación» con acuerdos de gobierno.
«Puedo entenderme con cualquiera sobre los temas que pueda haber. Puedo entenderme con cualquier fuerza política, pero lo que no puedo hacer, porque nadie lo espera de mí, más bien lo contrario, es apoyar el derecho de autodeterminación», dijo.
El líder de los populares puntualizó que, aunque pacte con partidos nacionalistas para ser investido presidente del Gobierno, tratará de llegar a un acuerdo con el PSOE sobre los grandes temas que afectan al país.
«No descarto ninguna posibilidad, pero en los temas de Estado buscaré el consenso con el PSOE: para luchar contra ETA, para hablar de España, para garantizar el sistema de protección social...», enumeró.
El presidente del PP explicó que lo primero que hará si llega a la Moncloa será llamar al PSOE para ofrecerle un «consenso» en la lucha contra el terrorismo, en política exterior, sobre el modelo de Estado y para reforzar el bienestar de los ciudadanos. 
Rajoy adujo que «el mayor error de esta legislatura» cometido por Rodríguez Zapatero fue «romper el consenso que existían desde 1978» entre los dos principales partidos políticos para estar juntos en los debates sobre el modelo de Estado.
Recalcó que «aquí jamás se había aprobado un estatuto sin el consenso de los dos principales partidos», en referencia a la aprobación parlamentaria del estatuto catalán sin el apoyo del PP.

Las listas del PP
Mariano Rajoy recurrió a su ironía gallega para esquivar las preguntas sobre la composición de las listas electorales del PP y la posible inclusión del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz- Gallardón, entre los candidatos al Congreso de los Diputados.
Aunque insistió en que no piensa hablar de este tema «hasta el año que viene», dejó abierta la posibilidad de que Gallardón le acompañe como candidato en las generales, ya que no se atrevió a garantizar que no haya algún alcalde en las listas. 
«Ya hay alcaldes del Partido Popular en el Congreso de los Diputados», apostilló a modo de ejemplo, en alusión a los cinco casos concretos, entre los que se encuentran el primer edil de Tres Cantos (Madrid), José Folgado, y la de Marbella (Málaga), Ángeles Muñoz.
Tampoco quiso aclarar si entre los asistentes al encuentro informativo, donde le acompañaba el propio Gallardón, estaba el que será «número dos» en la lista del PP por Madrid al Congreso de los Diputados. Cuando de manera más concreta le plantearon si el «número dos» en la lista de candidatos estaba en una mesa concreta, Rajoy recurrió a una intencionada ambig~edad: «No tengo respuesta distinta a la que le he dado antes».
Lo que sí confirmó Rajoy, entre bromas a cuenta de la incompatibilidad de cargos que establece el artículo 7 de los Estatutos del partido, es que no habrá ningún delegado del Gobierno del PP que concurra a los comicios. 
Rajoy llegó a reconocer que desconoce el contenido del artículo 7 de los Estatutos del partido, en el que se fija como norma general que es incompatible el puesto de alcalde con tener un escaño en el Congreso de los Diputados, aunque se otorga al Comité Ejecutivo Nacional la capacidad para determinar las excepciones. Finalmente, eludió aclarar qué hará si pierde las elecciones generales de 2008, ya que trabaja «en la realidad» y hoy por hoy considera de «ciencia ficción» que el Partido Popular pueda perder los comicios del mes de marzo.

Reforma del aborto
El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, se mostró hoy en contra de la intención del PSOE de reformar la Ley del Aborto al entender que resulta «disparatado» cambiar la normativa vigente por las prácticas ilegales descubiertas en varias clínicas abortivas.
Rajoy aseguró que demuestra ser «mal gobernante» y pone de manifiesto su «absoluta falta de convicciones» quien decide cambiar la legislación por los episodios que ocurren «en momentos determinados».
A su juicio, lo que debe hacer el Ejecutivo para evitar que se repitan los casos de abortos ilegales es «aplicar la ley», ya que considera un error que «si alguien incumple la ley haya que modificar la ley».
Rajoy criticó que Zapatero haya encargado a la dirección del PSOE una propuesta para modificar la Ley del Aborto cuando «hay un consenso social en mantener la regulación que existe en este momento».