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Sara Casasnovas atacada por un fanático

Estaba tan obsesionado con ella que viajó desde Alemania para conocerla. La intérprete de «Amar en tiempos revueltos» se salvó gracias a un amigo.

Sara Casasnovas atacada por un fanático
Sara Casasnovas atacada por un fanáticolarazon

Le pareció un tipo amable y hasta le halagó que desde el país germano siguiese su carrera. Hacía un año y medio que recibía cartas de amor de Arndt, por eso, cuando hace tres meses el susodicho entró en su camerino como un «fan» más, la actriz Sara Casasnovas no pensó que estaba cara a cara con el hombre que intentaría matarla.
Todo empezó a raíz de la participación de la artista en la serie «Amar en tiempos revueltos» y su emisión a través del Canal Internacional. El alemán, de 39 años, quedó prendado de Casasnovas y no dudó en hacérselo saber a través de unas misivas. Nada raro. Quien más quien menos en ese mundo tiene que hacer frente a los enamoramientos de sus seguidores. Incluso cuando, hace tres meses, Arndt se plantó en Getafe para ver a su diva en carne y hueso, Sara no sospechó del carácter obsesivo del germano.

 

Tres días de viaje
Hace una semana, partió desde Alemania para volver a encontrarse con la actriz. Pasó tres días en un autobús y al llegar a la capital se alojó en un hostal del centro. A partir de ahí, su comportamiento dejó de ser el del típico fan enamorado platónicamente. Todos los días, Arndt esperaba a Sara a las puertas del Reina Victoria. Apenas quedaban cuatro funciones de «La noche de la iguana». Arndt lo sabía y cada hoja que arrancaba del calendario se acercaba más el momento de perder de vista a su «amada».
Sara Casasnovas había hablado con Arndt y le explicó que no tenía ningún interés en él. En este punto, y tras varias noches de espera en la Carrera de San Jerónimo, la actriz, que seguía sin pensar que el alemán podía resultar peligroso, estaba empezando a cansarse de su continua presencia.

 

La última función
Ayer la cosa se complicó. Arndt sabía que no tendría más oportunidades. Era la última función y tenía preparado un plan. A las nueve y media de la noche, Sara abandonaba el Reina Victoria acompañada por unos amigos. Estaba esperándola. Se acercó a ella y, por enésima vez, le exigió que contestara a sus cartas. Sara le pidió de nuevo que la dejara en paz. Arndt sacó en ese momento una ballesta y la disparó con la intención de hacer diana en la cara de la actriz. Ella, instintivamente, movió la cabeza al tiempo que un amigo se abalanzó sobre el alemán. La flecha impactó en la manga izquierda del jefe de sala sin ocasionarle heridas, y Arndt se defendió con un spray de pimienta.
A partir de ahí se sucedieron carreras y gritos por las calles aledañas. Casasnovas se refugió en el bar Abarca y Arndt fue detenido por un Policía fuera de servicio en la Plaza de Canalejas. El alemán no pudo cumplir su plan, que, a juzgar por lo que llevaba en su mochila militar, era siniestro. Dos ballestas con sus repuestos, flechas de plástico con puntas tipo arpón de unos 15 centímetros, grilletes, un bote de gasolina, una soga gruesa y otra fina con el nudo del ahorcado, además de un cartel de la obra que la joven representó en marzo. Armdt pasará mañana a disposición judicial acusado de un delito de tentativa de homicidio, según informó hoy la Jefatura Superior de Policía.
 

 

Más allá de los tiempos revueltos
Aunque la audiencia la conoce por su papel de Alicia en la serie «Amar en tiempos revueltos», Sara Casasnovas (Orense, 1984) es una apasionada del teatro. Es más, sus comienzos en el mundo de la interpretación arrancaron en 1999 con su paso por escuelas como Casa Hamlet y Cuarta Pared, además de con cursos del método de John Strasberg y otras fórmulas de aprendizaje próximos al mundo de las tablas. Así, en el Festival de Teatro Gallego de 2007, logró su primer premio importante en la categoría de mejor actriz por su papel de Julieta en un montaje de «Romeo y Julieta», de Shakespeare. En varias ocasiones ha reconocido su devoción por las obras del autor inglés, pero también por Tennesse Williams, autor de «La noche de la iguana», Sam Shepard y Harold Pinter. De momento, no tiene proyectos en el mundo del cine, pero sí la intención de seguir desarrollando su carrera sobre los escenarios mientras continúa el éxito de la serie con la que ha logrado popularidad.