Londres

Sarkozy y Merkel instan a la UE a que lidere la salida a la crisis

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, lanzaron hoy un llamamiento conjunto a la Unión Europea (UE) para que adopte una posición común en la próxima cumbre del G20 y lidere la salida de la actual crisis. «La gran prioridad es construir una nueva arquitectura financiera global. La UE debe adoptar una posición común y tomar la iniciativa en este asunto», subrayan los dos líderes en una carta conjunta dirigida al presidente de turno de la UE y primer ministro checo, Mirek Topolanek, y al presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. En vísperas de reuniones importantes, «estamos totalmente convencidos de que debemos aprovechar la oportunidad histórica» que ofrece la cita del G20 del próximo 2 de abril en Londres para afrontar las «causas profundas» de la crisis actual, añaden. Sarkozy y Merkel acuden a la cita de la capital británica decididos a lograr «resultados concretos para el refuerzo de la regulación financiera internacional». Ambos consideran que la UE debe proponer que todos los fondos susceptibles de crear riesgos sean objeto de un registro, una regulación y una supervisión adecuados. En el sector financiero, «es necesario un mayor esfuerzo de estabilidad, transparencia y de supervisión», según los dos mandatarios, que instan también a la UE a que actúe hacia «un marco reglamentario europeo» sobre la base de las recomendaciones del grupo Larosière. Se trata de un grupo de expertos liderado por Jacques De Larosière, ex director-gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), al que el Ejecutivo comunitario encargó propuestas concretas para mejorar la supervisión en la UE y reforzar la protección de los ahorradores. En sus conclusiones presentadas a finales de febrero, el grupo subrayó que la UE debe avanzar hacia un sistema de supervisión más integrado, aunque no necesita un supervisor financiero único que sustituya a los organismos nacionales. Sarkozy y Merkel ponen fecha a los Veintisiete al señalar en su misiva que las primeras medidas para aplicar las recomendaciones de este equipo deberían adoptarse «de aquí a junio». Al margen de este asunto, ambos ratifican su compromiso a no crear nuevos obstáculos a los intercambios de bienes, servicios e inversiones, y a insistir ante sus socios internacionales para que tampoco lo hagan. «El endeudamiento público excesivo amenaza, a largo plazo, la estabilidad global», afirman antes de subrayar que unas finanzas públicas saneadas siguen siendo cruciales para la credibilidad y estabilidad de la UE. Por ello, reclaman a sus socios comunitarios un compromiso para «consolidar nuestras finanzas aplicando el Pacto de Estabilidad y de Crecimiento» y para retomar lo antes posible «nuestros objetivos presupuestarios a medio plazo». «La solidaridad y la responsabilidad son nociones claves de la UE», recuerdan los máximos dirigentes de Francia y Alemania, antes de concluir que «los dos países reafirman que la zona euro no es un club cerrado».