El Estado Islámico no fue el responsable de la muerte de los 13 soldados franceses en Mali

El Ejército francés ha insistido que los dos helicópteros, que fueron derribados en Mali el lunes, no se encontraban bajo el fuego de los yihadistas del Estado Islámico, contradiciendo por lo tanto el comunicado publicado por la milicia terrorista. En el trágico suceso fallecieron 13 soldados franceses de la fuerza Barkhane, que se encontraban realizando una misión estratégica de defensa de minas de uranio.

Según la versión ofrecida por ISWAP (Islamic State West Africa Province) los helicópteros chocaron después de que uno de ellos se retirara bajo fuego de sus combatientes. En el comunicado en el que se atribuyen la autoría de los hechos, el grupo terrorista no proporcionó ninguna evidencia que constatase la veracidad de tales afirmaciones.

“No ha habido disparos procedentes de los yihadistas hacia nuestros helicópteros”, dijo el Jefe del Estado Mayor del ejército francés, Francois Lecointre en declaraciones a la emisora francesa RFI. La versión oficial gala de los hechos se mantiene respecto a que ambos aparatos colisionaron durante una operación de combate. Lecointre añadió que si bien Francia no tiene intención de retirar sus tropas de territorio maliense, necesita mayor apoyo por parte de sus aliados.

Las víctimas pertenecían a un grupo que formaba parte de la “Operación Barkhane”, que tiene como objetivo impedir que los grupos yihadistas que se habían hecho fuertes en el norte y centro de Mali, se hicieran con el control de todo el país. El presidente francés, Emmanuel Macron, le ha pedido a su Gobierno que analice las operaciones militares galas en la región, aclarando que “todas las opciones están abiertas”. Sin embargo, los oficiales franceses han descartado retirar los 4.500 efectivos desplegados por temor a que esto pueda originar un caos aún mayor en la zona.