Reino Unido

La independencia en Escocia deberá esperar

John Wetherell, profesor de International Business en la EAE Business School

Scottish leader Sturgeon demands a post-Brexit independence referendum
La primer ministro escocesa Nicola Sturgeon durante una conferencia de prensa en Bute House, en la que solicitó la organización de un segundo referéndum por la independencia de Escocia.POOLReuters

LA RAZÓN ha entrevistado a John Wetherell, profesor de la EAE Business School, para comentar los hechos de más inmediata actualidad en Reino Unido, una semana después de las históricas elecciones. Además en el día de hoy la jefa de Gobierno escocesa, Nicola Sturgeon, ha aprovechado los buenos resultados obtenidos en las urnas, que le colocan como la tercera mayor fuerza en Reino Unido, para solicitar permiso para llevar a cabo un segundo referéndum de independencia de Escocia del Reino Unido.

¿Será el segundo referéndum en Escocia una batalla entre Nicola Sturgeon y Boris Johnson?¿Romperá esta la unidad de Reino Unido?

Parece lógico el hecho de que los escoceses tengan otro referéndum dado su voto a favor del SNP (Partido Nacionalista Escocés). Es verdad que Johnson podría demorarlo dado la mayoría que tiene, pero no creo que encuentre tampoco el apoyo suficiente en Inglaterra como para sostener durante mucho tiempo esta postura.Por lo tanto, sí, la unidad de Reino Unido está en riesgo. Evidentemente los escoceses podrían votar a favor de la independencia, es una cuestión de representación. Escocia ya no vota a los dos partidos mayoritarios de la política británica.

¿Habrá alguna sorpresa durante la tramitación de la Ley Brexit en el Parlamento británico?

No. El mandato es muy claro como consecuencia de la mayoría absoluta obtenida por Boris Johnson y los conservadores. El apoyo que se va a encontrar el primer ministro durante esta legislatura va a ser muy amplio. La cuestión es cómo sacar a Reino Unido de la Unión Europea cumpliendo así con el deseo de los votantes.

¿Cuál es el perfil del equipo de Boris Johnson?

El «premier» ha optado por rodearse de gente leal, como mínimo hasta febrero. El Brexit en estos momentos forma parte de la política doméstica más que de la política exterior. Se trata de una cuestión de confianza entre el Gobierno y el ciudadano. No habrá, por lo tanto, nombramientos que pongan en cuestión la determinación del Gobierno de cumplir con los deseos del electorado.

¿Cree que las negociaciones sobre la futura relación entre Reino Unido y la Unión Europea serán tan complicadas como las que fueron necesarias para alcanzar un acuerdo sobre el Brexit?

Sí, sin duda. Las negociaciones entre ambas partes serán muy largas y muy complicadas. Además, en caso de que Estados Unidos aumente sus medidas contra el superávit comercial de la Unión Europea, se complicarán aún más ahora que parece haber llegado a un paréntesis en su conflicto arancelario con China.