Austria

La pandemia eleva el paro en Austria a su nivel más alto desde 1946

El Gobierno de Sabistian Kurz aprobó un programa de ayudas económicas de 38.000 millones de euros tras imponer el confinamiento el 16 de marzo

Coronavirus pandemic in Austria
Un empleado y un cliente llevan mascarillas en un supermercado de Viena/EFECHRISTIAN BRUNAAgencia EFE

La tasa de desempleo en Austria se disparó en las últimas dos semanas debido a la pandemia del coronavirus hasta cerrar marzo en el 12,2 %, 4,7 puntos más que la registrada hace un año y en números absolutos un nivel que no se veía desde el año siguiente al fin de la Segunda Guerra Mundial. Según informó este miércoles el Servicio del Mercado Laboral (AMS), al día de ayer (31 de marzo) había 562.522 ciudadanos sin empleo, un 52,5 % más que al final del mismo mes del año pasado.

En números absolutos, esa cifra es la más alta desde 1946. Desde entonces, el número de habitantes del país centroeuropeo aumentó en unos 2 millones, hasta 8,8 millones.

La fuerte subida del paro se produjo después de que el Gobierno, integrado por conservadores y ecologistas, impusiera el 16 de marzo un confinamiento general para frenar la pandemia, de forma que los ciudadanos solo pueden salir a la vía pública para ir a trabajar, comprar alimentos, acudir al médico o dar un breve paseo. Tras la cancelación de actos masivos, se cerraron todos los centros educativos, restaurantes, hoteles y otros locales de ocio, así como los comercios salvo los de artículos básicos.

El mayor incremento de desempleados, del 145%, se registró en el sector hotelero y de gastronomía, seguido de la construcción (95 %), y el del transporte y almacenamiento (84 %).Al mismo tiempo, cayó “de inmediato”, en un 20,5 %, el número de puestos de trabajo vacantes, informó el AMS en un comunicado publicado en su web.

Su director, Johannes Kopf, destacó en la nota que “este aumento extremo del desempleo no solo es un enorme desafío para las numerosas personas afectadas, sino que también pone en una prueba sin precedentes al AMS”, que desde principios de 2017 no registraba una subida del paro.

La grave situación se produce a pesar del amplio paquete coyuntural, por un valor total de 38.000 millones de euros (entre ayudas directas, moratorias fiscales y garantías crediticias) adoptado por el Ejecutivo el 18 de marzo precisamente para limitar el desempleo. “Nuestro lema es asegurar los puestos de trabajo cueste lo que cueste”, dijo entonces el canciller federal, Sebastian Kurz, aunque admitió que la base del negocio de muchas empresas “se ha desvanecido”.

Los porcentajes citados arriba están calculados según la definición nacional de la tasa de paro, que suele arrojar un resultado superior al método internacional aplicado por Eurostat, según el cual el índice austríaco fue del 4,4 % en febrero (frente al 4,7 % de la versión nacional).

Los supermercados empiezan a repartir mascarillas

Los supermercados austriacos comenzaron hoy a entregar máscaras faciales básicas a compradores en gran medida conformes antes de que sean obligatorias la próxima semana, aunque persistió cierta confusión sobre la nueva medida e incertidumbre sobre su utilidad para combatir el coronavirus. Kurz dijo el lunes que pronto se requerirán máscaras en los supermercados y posiblemente más tarde en los lugares públicos en general, un cambio cultural para un país que introdujo la prohibición de cubrirse la cara como velos musulmanes hace 18 meses a raíz de la crisis migratoria de Europa.
La vecina Eslovaquia y la República Checa, que tienen muchos menos casos, han introducido una medida más amplia, haciendo que las máscaras faciales sean obligatorias fuera del hogar. El apoyo para usar máscaras en público parece estar aumentando en toda Europa.
"Creo que tiene razón. Sí, Kurz está manejando esto correctamente", dijo una compradora en un supermercado de Viena que solo dio su primer nombre, Martina, después de ponerse una máscara gratuita.
Austria limita con Italia, uno de los países más afectados del mundo, pero se adelantó en su brote para cerrar escuelas, bares y otros lugares de reunión. Sus más de 10.000 casos aún no han abrumado su sistema de salud, pero Kurz dice que eso podría suceder en dos semanas. Ha habido 146 muertes hasta ahora. La Organización Mundial de la Salud ha cuestionado el uso de una población completa con máscaras faciales para frenar el coronavirus y dijo que puede ser contraproducente, ya que el usuario podría infectarse poniéndose o quitándolo incorrectamente.
Kurz dice que el objetivo es evitar que el usuario tosa o estornude sobre otros y los infecte. La medida ha sido ampliamente apoyada. El jefe de la oposición socialdemócrata dijo que las máscaras también deberían ser obligatorias en el transporte público.