Los contagios se disparan en Rusia

El presidente ruso, Vladimir Putin, ha dado orden al Gobierno de que proporcione datos diarios de la propagación del nuevo coronavirus, después de que Rusia haya registrado casi 5.000 casos nuevos en un solo día.

Las infecciones por coronavirus en el país han comenzado a dispararse bruscamente este mes de abril después de unas primeras semanas en las que se detectaban muchas menos infecciones que en las naciones de Europa occidental. Pero este sábado, el recuento oficial de casos fue de 36.793, un aumento récord de 4.785 en 24 horas, y el número de muertes pasó de 40 a 313, siempre según cifras oficiales.

El Gobierno debe “proporcionar un pronóstico a corto plazo del número de ciudadanos que pueden haber contraído la nueva enfermedad infecciosa (Covid-19)” e informar sus estimaciones diariamente, según una orden publicada en la web del Kremlin.

En Moscú, una ciudad de 12,7 millones de habitantes que se ha convertido en el epicentro del brote de coronavirus de Rusia, los casos aumentaron en 2.649 a 20.754, con la mitad de todas las nuevas muertes reportadas el sábado.

Sin embargo, el alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin, declaró que las medidas de bloqueo introducidas por primera vez en marzo estaban dando sus frutos. “La tasa de contagiios en la ciudad está creciendo, pero no de manera exponencial, y lejos del peor de los casos”, escribió Sobyanin en su web. “Hace una semana, las instituciones médicas de Moscú estaban trabajando al límite. Hoy, han cambiado a un modo más normal tras sufrir un stock de capacidad”, dijo Sobyanin.

El confinamiento en Rusia fue declarado inicialmente el 30 de marzo. El Gobierno prohibió a los residentes abandonar sus hogares a menos que fueran a comprar alimentos o medicinas, recibir tratamiento médico urgente o pasear al perro.

Las autoridades también introdujeron un sistema de permisos de viaje a partir del 15 de abril, y Sobyanin dijo este sábado que las autoridades usarían cámaras de tráfico para atrapar a los conductores que viajan sin pases.

Celebraciones de Pascua

Las autoridades y los clérigos han instado a los cristianos a quedarse en casa durante el fin de semana ortodoxo de Pascua, aunque un alto clérigo instó a la Policía a ser indulgente con aquellos que aún intentan llegar a su iglesia, informa Reuters.

De hecho, el presidente Putin, no acudió a la misa de la vigilia pascual debido a los llamamientos de las autoridades sanitarias y de la Iglesia para que los fieles recen en esta ocasión en casa, indicó hoy el Kremlin.

Putin, un creyente confeso, asiste cada año a la misa del Gran Sábado en la catedral moscovita de Cristo Salvador, principal templo ortodoxo de Rusia, que oficia el patriarca ruso Kiril. Pero hoy se quedó en la residencia campestre en Novo-Ogariovo, situada a las afueras de Moscú, informó su portavoz, Dmitri Peskov.

“El presidente no irá al templo y permanecerá en casa. Como saben, él vive y trabaja ahora en la residencia estatal de Novo-Ogariovo. En la tarde, el presidente encenderá una vela en una pequeña capilla que hay en el terreno de la residencia”, indicó. No obstante, y como es tradición, Putin felicitará la Pascua ortodoxa al patriarca, a los cristianos ortodoxos y a todos los rusos, añadió Peskov.