Política

Doha

Afganistán solo participará en unas conversaciones con los talibán «lideradas por afganos»

El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, ha advertido este miércoles de que su Gobierno se mantendrá al margen de las conversaciones de Qatar entre Estados Unidos y los talibán "mientras no estén lideradas por los afganos", al tiempo que ha anunciado la suspensión de las negociaciones con Washington respecto a la futura presencia militar norteamericana debido a "las contradicciones"del Gobierno estadounidense en relación con el proceso de paz.

"En tanto el proceso de paz no esté liderado por los afganos, el Alto Consejo de Paz no participará en las conversaciones de Qatar", ha afirmado Karzai en un comunicado, en referencia al órgano establecido por él mismo en 2010 para llevar a cabo las negociaciones con los talibán.

El propio Karzai anunció ayer martes la intención de su Gobierno de enviar una delegación a Qatar, pero dejó claro que las conversaciones deberían trasladarse cuanto antes a Afganistán. El presidente de Estados Unidos, Barack Obaba, declaró ayer martes que las autoridades de Afganistán deberían liderar el proceso de paz.

Asimismo, Karzai ha advertido en su comunicado de que la apertura de la oficina de los talibán en Qatar supone un incumplimiento por parte de Estados Unidos de sus promesas sobre cuál iba a ser el papel de esta oficina. Fuentes gubernamentales afganas han informado a Reuters de que la apertura de la oficina de Doha ha conferido una "identidad oficial"a los talibán que no satisface en absoluto a Kabul, ya que incluso se les ha permitido izar su propia bandera del "Emirato Islámico".

"Las autoridades estadounidenses nos habían dicho que la oficina serviría para impulsar las conversaciones de paz, pero no para darles una identidad", ha lamentado un responsable gubernamental. "Lo de la bandera de los talibán y la pancarta del Emirato Islámico no lo esperábamos", ha añadido, en referencia al tratamiento oficial del país durante el régimen talibán de 1996-2001.

Entretanto, una delegación de Estados Unidos ha llegado este miércoles a Qatar para iniciar, a partir de mañana jueves, las conversaciones con los representantes de los talibán en Doha, capital del Emirato, según han informado fuentes diplomáticas.

Fuentes norteamericanas han indicado que Washington insistirá en sus conversaciones en que los talibán deben romper sus relaciones con Al Qaeda, poner fin a la violencia y aceptar la Constitución afgana, incluida la protección de las mujeres y las minorías.

Por su parte, los talibán seguramente reclamen el regreso de sus comandantes actualmente encarcelados en el centro de detención estadounidense de Guantánamo, en Cuba (una petición a la que se oponen numerosos congresistas norteamericanos), y la salida de todas las tropas extranjeras.

Los propios talibán no han confirmado de momento la fecha del inicio de las negociaciones y tampoco han aclarado si las objeciones del Gobierno afgano van a afectar a las conversaciones. Los talibán se han negado hasta la fecha a conversar con Karzai, a quien consideran un "títere"de las potencias occidentales.

No obstante, fuentes oficiales afganas han indicado que los insurgentes han empezado a ver con buenos ojos la posibilidad de dialogar con el Gobierno e incluso podrían defender una solución política que permita el establecimiento de un Ejecutivo "justo"y la marcha de las fuerzas de ocupación extranjeras.

Seguridad

Aparte, la oficina de Karzai ha anunciado este mismo miércoles la suspensión de las negociaciones sobre seguridad con Washington --en las que se debería determinar el número de tropas norteamericanas que permancerán en el país tras la retirada de la mayoría del contingente

a finales de 2014-- debido, según un comunicado, a "la contradicción entre las palabras y los hechos de Estados Unidos de América respecto al proceso de paz".

"En el curso de una reunión especial dirigida por el presidente Hamid Karzai, el presidente ha decidido suspender las conversaciones sobre el acuerdo de seguridad con Estados Unidos a causa de la incoherencia entre sus declaraciones y sus actuaciones respecto al proceso de paz", ha declarado este miércoles a Reuters el portavoz de Karzai, Aimal Faizi.

Las negociaciones sobre el Acuerdo Bilateral de Seguridad (BSA, por sus siglas en inglés) comenzaron a principios de este año y, de concluirse, permitirán definir el tipo de presencia militar de Estados Unidos en Afganistán en los próximos años. El fracaso de las negociaciones sobre un acuerdo similar en Irak aceleró la retirada de todas las tropas estadounidenses del país.

En medio de toda esta polémica, Barack Obama ha celebrado este miércoles, durante su actual gira por Europa, el compromiso de Karzai de asumir pronto la responsabilidad de la seguridad, que hasta la fecha recaía fundamentalmente en la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), liderada por la OTAN.

Asimismo, ha advertido de que este compromiso de Karzai supone "un importante paso hacia la reconciliación, pero es de momento muy prematuro". "Podemos adelantar que habrá muchos baches en el camino", ha declarado este miércoles durante una rueda de prensa con la canciller alemana, Angele Merkel, al término de la cumbre del G8.