Armas

Un exempleado mata a tiros a cuatro personas en un banco de Kentucky

Biden: “Demasiados estadounidenses están pagando el precio de la inacción con sus vidas”

No hay día sin tregua en Estados Unidos cuando se trata de violencia armada. La ciudad de Louisville, al norte del estado de Kentucky, se convertía este lunes en el escenario de un nuevo tiroteo masivo, ensombreciendo la celebración nacional del Día de Pascua con cuatro víctimas mortales y una decena de heridos.

Alrededor de las 8:30 de la mañana hora local, las autoridades policiales recibieron una alerta desde la céntrica sucursal bancaria de Old National Bank, situada en una de las avenidas principales de la ciudad. Apenas tres minutos tardaron los agentes de la Policía en dar respuesta a la llamada urgente de “tirador activo”, pero ni siquiera ese pequeño espacio de tiempo fue suficiente para evitar la tragedia.

Los agentes “se encontraron con disparos activos que seguían produciéndose” en el interior del establecimiento, dio a conocer Paul Humphrey, subjefe del Departamento de la Policía Metropolitana de Louisville, e “intercambiaron disparos con el tirador”. Las autoridades adelantaron que el autor de la matanza, que murió también en el lugar de los hechos, habría sido identificado como un exempleado de la sucursal bancaria.

Por esa misma razón, y a pesar de las fuertes medidas de seguridad del banco, el sospechoso pudo haberlas sorteado para alcanzar su objetivo, gracias a su conexión directa como antiguo trabajador, aunque el móvil exacto todavía no había trascendido al cierre de esta edición.

“No sabemos exactamente las circunstancias de su muerte en este momento”, adelantó Humphrey a los periodistas durante una rueda de prensa posterior a los acontecimientos. La Policía confirmó que dos de sus agentes están ingresados en el hospital como consecuencia de los disparos, uno de ellos en estado grave.

“Esto es horrible. Tengo un amigo muy cercano que no ha sobrevivido hoy”, explicó el gobernador de Kentucky, Andy Beshear, en la conferencia de prensa. “Y tengo otro amigo cercano que tampoco, y uno más que está en el hospital, y espero que sí lo logre”, añadió el gobernador demócrata, visiblemente consternado y casi al borde de las lágrimas.

El arma del asaltante, también de nuevo una R-15. Un rifle de asalto, diseñado como arma de guerra, cuya compra y uso se ha extendido dramáticamente en los últimos años en Estados Unidos. La gran mayoría de los recientes tiroteos masivos han sido materializados con este tipo de rifle, el R-15, uno de los más demandados en la venta privada de armas de todo el país.

El senador y líder republicano, Mitch McConnell, residente en Louisville, reaccionó a la noticia afirmando estar “devastado” por el trágico suceso. “Enviamos nuestras oraciones a las víctimas, sus familiares y la ciudad, mientras esperamos más información”, publicó McConnell.

Con cerca de 630.000 habitantes, Louisville es la ciudad más grande del estado de Kentucky y se encuentra situada en la frontera con Indiana sobre el río Ohio. Considerado “estado libre” en cuanto a la regulación de armas, cualquier persona mayor de 18 años, procedente de cualquier estado del país, puede comprarlas o incluso portarlas de manera legal.

“Una vez más, nuestra nación está de luto después de un acto sin sentido de violencia armada. Jill y yo rezamos por las vidas perdidas y afectadas por el tiroteo de hoy”, escribió el presidente Joe Biden en sus redes sociales.

Y es que el contador de masacres sigue subiendo sin control en el país, alcanzando otro histórico récord, con este último episodio de violencia armada en Louisville, de 146 tiroteos masivos en estos primeros meses de 2023. Es decir, 146 tiroteos en apenas 100 días.

“Demasiados estadounidenses están pagando el precio de la inacción con sus vidas. ¿Cuándo actuarán los republicanos en el Congreso para proteger nuestra comunidades?”, preguntó retóricamente Biden a sus rivales políticos del Congreso. El presidente demócrata ha marcado, como prioridad de su agenda en la Casa Blanca, la prohibición de los rifles de asalto utilizados en matanzas como la de este lunes en Kentucky. Pero, para ello, necesita contar con el apoyo bipartidista del Poder Legislativo en el Capitolio.