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Conmoción en Francia por el crimen de una niña de 9 años en Calais
Conmoción en Francia por el secuestro y asesinato de la pequeña Chloe, de 9 años. La niña fue capturada por un hombre de nacionalidad polaca cuando jugaba el pasado miércoles con otros niños en un parque de Calais.
Chloé estaba jugando ayer a primera hora de la tarde con otros niños cerca de su casa en el barrio del Beau Marais de Calais cuando fue raptada por un individuo que, según varios testigos, huyó con ella en un coche con matrícula belga.
Apenas dos horas después, las fuerzas del orden encontraban su cuerpo desnudo, con signos de violencia sexual y estrangulamiento en una zona boscosa próxima al puerto de la ciudad, y capturaron también al sospechoso, que se encontraba en estado de embriaguez. El detenido reconoció los cargos de secuestro y asesinato.
Natacha Bouchart, la alcaldesa de Calais, se quejó de que el presunto responsable de 38 años, de nacionalidad polaca, hubiera podido circular por su ciudad pese a que sus condenas en Francia llevaban aparejadas la expulsión del país.
"Cómo en una ciudad como Calais -señaló Bouchart- un extranjero, condenado en varias ocasiones, podía circular libremente, y cómo pudo ser dejado en libertad cuando ya había cometido actos odiosos".
"Quiero la verdad para la familia de Chloé (la niña asesinada), para la propia Chloé y para todos los habitantes de Calais", añadió la alcaldesa al cabo de una marcha de repulsa en la que participaron unas 5.000 personas.
La ministra de Justicia explicó que el sospechoso, arrestado muy cerca del cuerpo sin vida de la menor en un bosque de las afueras de Calais, al término de su última condena en Francia había sido entregado a Polonia, que lo reclamaba en virtud de una euroorden.
"Estaba bajo la responsabilidad de las autoridades polacas", precisó Taubira, antes de apostillar que "la investigación deberá aclarar cómo infringió esa expulsión".
El fiscal de Boulogne sur Mer, Jean-Pierre Valensi, encargado del caso, precisó en conferencia de prensa que el sospechoso había sido condenado dos veces en Francia por extorsiones con violencia, en 2004 (a cuatro años) y en 2010 (a seis años).
En marzo del pasado año, al término de la segunda pena fue entregado a la justicia polaca, que había emitido contra él un mandato europeo de detención por acusaciones de robo y extorsión, comentó Valensi.
El primer ministro francés, el socialista Manuel Valls, aseguró que se aclarará "toda la verdad"sobre "el itinerario"del sospechoso, y que a ese respecto, los titulares de Interior de Francia y Polonia están en contacto.
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