Guerra en Ucrania
Un documento filtrado revela cómo actuaría EE UU en caso de que Putin invadiera Europa
La administración estadounidense ha reclamado en numerosas ocasiones a Europa una mayor inversión en defensa
El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca ha marcado el inicio de una nueva etapa en las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y la Unión Europea, que hasta ahora había sido uno de sus principales aliados. La ruptura entre ambos bloques se ha hecho especialmente evidente en el contexto de la guerra en Ucrania. La nueva administración se ha posicionado como mediadora entre Kiev y Moscú en la búsqueda de un alto el fuego, excluyendo a Europa de las negociaciones directas.
Este no ha sido el único gesto de distanciamiento del republicano, quien ya durante su primera legislatura presionó a los miembros de la OTAN para que incrementaran su gasto en defensa. Más recientemente, en su intervención en el Foro de Davos, Trump exigió a los países de la Alianza Atlántica destinar al menos el 5% de su PIB a este ámbito. "Si no pagan, no voy a defenderlos", advirtió el presidente estadounidense, dejando clara su intención de que Washington abandone el papel de principal garante de la seguridad en Europa, un rol que ha desempeñado desde la Segunda Guerra Mundial.
Un apoyo improbable
Su postura no parece cambiar ni siquiera ante la posibilidad de una nueva ofensiva rusa contra el continente europeo. The Washington Post ha tenido acceso a un memorando confidencial del Pentágono en el que se evalúan diversos escenarios, incluida la crisis entre China y Taiwán, así como la posible respuesta de Estados Unidos en caso de una escalada militar en Europa.
El documento, firmado por el secretario de Defensa, Pete Hegseth, señala que es "improbable" que EE. UU. brinde un respaldo "sustancial" a sus aliados europeos en caso de una ofensiva militar rusa. Además, el texto recoge la intención de Washington de trasladar a los países de la OTAN la responsabilidad principal de la defensa de la región.
Como apuntan desde TWP, según el informe, EE. UU. sí proporcionaría apoyo en materia de disuasión nuclear frente a Rusia. Sin embargo, el documento deja claro que "la OTAN solo debería contar con las fuerzas estadounidenses que no sean necesarias para la defensa nacional ni para misiones de disuasión en el Indo-Pacífico".
En línea con la postura oficial del gobierno estadounidense, el memorando insiste en la necesidad de que Europa incremente su gasto en defensa para garantizar que la Alianza Atlántica sea capaz de disuadir o repeler una agresión rusa, incluso si EE. UU. ya estuviera involucrado en un conflicto prioritario en otra región.