Política

Brexit

Cobyn, acusado de llamar a May "mujer estúpida"

El líder laborista británico lo desmiente en medio de las críticas por no presentar una moción de cenSura contra el Gobierno conservador

El líder laborista, Jeremy Corbyn, durante el debate parlamentario
El líder laborista, Jeremy Corbyn, durante el debate parlamentariolarazon

El líder de la oposición en Reino Unido, el laborista Jeremy Corbyn, ha tachado supuestamente de «estúpida» a la primera ministra, Theresa May.

El Brexit ha quedado en un segundo plano por la polémica creada después de que, durante en pleno debate parlamentario, las cámaras de la sala grabaran al líder de la oposición, Jeremy Corbyn, susurrando lo que parecía ser la expresión “mujer estúpida”, después de una intervención de May.

Corbyn negó la acusación y afirmó que dijo “gente estúpida”, en referencia a aquellos que “quieren convertir un debate sobre la crisis nacional”, derivada del Brexit, en una “pantomima”, aclaró. “Estoy completamente en contra del lenguaje sexista o misógino de cualquier tipo”, subrayó.

El episodio dañó aún más la imagen del laborista que estos días ha sido criticado por el resto de los partidos de la oposición por no apoyar la moción de confianza contra el Gobierno que estas formaciones presentaron el martes por la noche para intentar forzar elecciones anticipadas. El Ejecutivo sólo tiene obligación de responder cuando la moción la presenta el líder de la oposición.

El presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, manifestó que “nadie puede estar un 100 % seguro” de lo que había dicho el dirigente del Partido Laborista, “ni siquiera -matizó-, los profesionales en lectura de labios”. Con todo, sostuvo que “es fácil suponer”, después de haber visto los vídeos que recogen el incidente, que pronunció las palabras “mujer estúpida”, aunque recordó que Corbyn no se estaba dirigiendo al Parlamento en el momento en que lo dijo sino a sus compañeros de bancada.

La disputa en los Comunes empezó cuando un diputado “tory” criticó al líder laborista por su ataque a la jefa del Gobierno, presuntamente después de ver el vídeo de la sesión colgado en Internet por el portal digital anti-Corbyn The Red Roar.