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El legado de Merkel se disuelve: arrecian las críticas contra la excanciller tras recibir la máxima condecoración de Alemania

El presidente Steinmeier le ha entregado la Gran Cruz de la Orden del Mérito por sus logros excepcionales en 16 años de Gobierno

La canciller alemana, Angela Merkel asistió el jueves y viernes a su último Consejo Europeo
La canciller alemana, Angela Merkel asistió el jueves y viernes a su último Consejo EuropeoAris OikonomouAgencia AP

La excanciller Angela Merkel ha recibido este lunes en Berlín la Gran Cruz de la Orden del Mérito por los logros excepcionales en sus 16 años al frente del Gobierno en Alemania. Es el mayor reconocimiento que concede, en este caso, el presidente de la República Federal.

El jefe de Estado Frank-Walter Steinmeier extendió la condecoración a la primera mujer en liderar el país en una ceremonia celebrada en el Palacio de Bellevue, donde reside la excanciller, en la que estuvieron presentes su sucesor, Olaf Scholz, y la presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen, entre otras personalidades.

La distinción reconoce a Merkel como una de las representantes políticas más importantes de la Alemania de posguerra. Hasta la fecha, sólo Konrad Adenauer, el primer canciller de la República Federal, y Helmut Kohl, el arquitecto de la unificación y uno de los artífices del proyecto de la Unión Europea, habían recibido este reconocimiento.

Pero Merkel, elogiada en el pasado por guiar con solvencia a la primera economía de la eurozona en plena la crisis financiera, responder a la crisis migratoria con una política de puertas abiertas y gestionar sin excesivos sobresaltos la pandemia de Covid-19, ha sido objeto de fuertes críticas en los últimos meses por su aproximación política a la Rusia de Vladímir Putin.

La invasión rusa de Ucrania tiró por tierra buena parte de su legado. Sus críticos denuncian que la excanciller colocó a Alemania en una posición de debilidad con respecto del Kremlin.

“El verdadero error fue seguir confiando en Putin, incluso cuando todos los signos externos indicaban que ya no había que hacerlo”, declaró el reconocido historiador Andreas Rödder, miembro de los democristianos de la CDU, la formación de Merkel. “Es un error conceder esta Gran Cruz ahora, un año y medio después del final de su mandato”.

Wolfgang Schäuble, quien fuera miembro de su gabinete y uno de los halcones de la CDU, también cuestionó que se situara a la excanciller al mismo nivel que Adenauer, Willy Brandt o Kohl, por el mismo motivo. “Quizás sea demasiado pronto para juzgar de forma concluyente si la señora Merkel será clasificada entre los grandes cancilleres”, declaró anoche al diario Handelsblatt.

Las críticas, sin embargo, no sólo se centran en su postura hacia Rusia. Tienen que ver también con la política energética e industrial. El vicepresidente de la CDU, Carsten Linnemann, cargó contra la excanciller por el abandono de la energía nuclear: “Fue un error por la forma en que se hizo en su momento, sin decir cómo íbamos a abastecernos de energía de una forma razonablemente autosuficiente”, dijo en la cadena de televisión N-TV.

Desde que abandonara el poder en diciembre de 2021, Merkel ha mantenido un perfil bajo. En sus contadas apariciones públicas, ha evitado dar la razón a sus críticos.

Paradójicamente, quien ha salido en defensa de la excanciller ha sido Saskia Esken, colíder del Partido Socialdemócrata. Esken reconoció su amplia trayectoria y elogió su “habilidad diplomática y su inteligencia empática, con las que logró en repetidas ocasiones forjar coaliciones y compromisos viables tanto en la escena nacional como en la internacional”. “Merkel dirigió el país con sentido de la proporción a través de las numerosas crisis de su mandato”, sentenció.