Corea del Norte

Maniobras militares en medio del deshielo con Corea del Norte

Las integrantes del grupo surcoreano de «K-pop», ayer, antes de su actuación en Pyongyang
Las integrantes del grupo surcoreano de «K-pop», ayer, antes de su actuación en Pyongyanglarazon

- Corea del Sur y su gran aliado Estados Unidos comenzaron ayer, como viene siendo habitual cada año alrededor de estas fechas, sus tradicionales maniobras militares conjuntas, unos ejercicios que siempre han levantado la ira de Pyongyang y que, por el contrario, arrancaban en este 2018 con el líder norcoreano, Kim Jong Un, disfrutando junto a su mujer de un concierto que la banda surcoreana «K-Pop» ofrecía en su territorio.

El gesto reconciliador de Kim formaba parte del sorprendente ejercicio diplomático que el mandatario está llevando a cabo desde que los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang brindaran la oportunidad de que se produjera un deshielo en las relaciones intercoreanas. La tregua olímpica de entonces sirvió de excusa perfecta para posponer estas maniobras militares, considerado por Pyongyang como un simulacro de invasión de su territorio. Normalmente generan una dura respuesta del régimen Juche con lanzamientos de misiles incluidos. No fue así en esta ocasión en la que incluso el propio Kim, embarcado en una ronda de negociaciones previas al encuentro que tendrá con el presidente surcoreano, Moon Jae In, el próximo 27 de abril, admitió entender que no se pudieran aplazar más en el tiempo.

Las maniobras, conocidas como «Águila Potro», implican a más de 11.500 efectivos norteamericanos y 300.000 surcoreanos y tienen como misión mejorar la capacidad defensiva por tierra, mar y aire de Seúl ante un eventual ataque de su vecino del norte. Una posibilidad que sobrevoló la región a lo largo de todo 2017 cuando Kim se enzarzó con el presidente norteamericano, Donald Trump, en una pelea en la que se intercambiaron insultos y amenazas nucleares mutuamente. No obstante, rebajada la tensión, relajadas las maniobras y, como respuesta a la disponibilidad al diálogo de Kim, su contraparte ha respondido con unos ejercicios que, con un perfil más bajo, durarán un mes en lugar de noventa días de duración de los años anteriores. Aun así, en la península coreana se desplegará el buque anfibio «USS Wasp» o los los cazas furtivos F-35B.