Marruecos desarticula la célula del Estado Islamico que degolló a dos escandinavas

Un total de nueve individuos han sido detenidos en Marruecos en relación con el asesinato de dos ciudadanas escandinavas que fueron degolladas por una célula del Estado Islámico (Daesh). Entre los arrestados, por agentes de la Oficina Central de Investigaciones Judiciales (BCIJ), bajo la Dirección General de Vigilancia Territorial Nacional (DGST), están los presuntos autores directos del crimen: Younes Waziad ; Abdessamad Eijoud y Rashid Aftati, según han informado a LA RAZÓN fuentes antiterroristas.

Las detenciones se practicaron en las ciudades de Marrakech, Essaouira, Sidi Bennour, Tánger y Shtouka- Ait Baha.

Los citados yihadistas, según se aprecia en las fotografías que se reproducen en esta misma página, se habían rapado la barba, que suelen utilizar los terroristas del Daesh, para tratar de huir a bordo de un autobús que habían tomado en Marrakech, pero fueron detectados y capturados por los agentes marroquíes en una brillante operación.

Los investigadores tratan de determinar la vinculación de los otros arrestados con la célula y con el Daesh. Y si tenían conocimiento de las intenciones criminales de los autores materiales de los asesinatos.

La acción criminal fue perpetrada en la localidad de Imlil, cerca de Marrakech. Grabaron un vídeo, que LA RAZÓN conoce y que no difunde por razones obvias (las imágenes son de una extraordinaria dureza), mientras degollaban a las turistas y en el que se escuchan claramente los gritos de las víctimas antes de fallecer. Hicieron otro vídeo en el que muestras su adhesión al Estado Islámico y a su “califa”, Abu Bark Bagdhadi.

Después, se cortaron las barbas y se montaron en un autobús que salía de Marrakech con destino a Agadir. En ese momento, se produjo su arresto.

Los terroristas, que además de degollar a las turistas desmembraron sus cuerpos, habían buscado durante algún tiempo a turistas aislados de los que recorren la zona, con el fin de matar a “cruzados”.

Medios marroquíes subrayan que los autores de los asesinatos son individuos con poca educación, que viven en condiciones de vida precarias. Una vez fanatizados, cambian de comportamiento y se dedican por completo al yihadismo.