Fuerzas Armadas
Marruecos se interesa por la compra del carro de combate surcoreano K2 Black Panther
Supera a su homólogo estadounidenses, como el Abrams, en muchos aspectos, especialmente en consumo de combustible.
Marruecos ha expresado su interés en comprar tanques surcoreanos K2 Black Panther durante reuniones celebradas en Seúl a principios de abril, según informes de sitios web de defensa.
Al respecto, el sitio web militar búlgaro, especializado en asuntos militares, afirmó que los detalles de este posible acuerdo permanecen confidenciales, al tiempo que destacó que la existencia de negociaciones "refleja la ambición de Marruecos de modernizar sus fuerzas armadas, mientras que Corea del Sur busca fortalecer su influencia como exportador global de armas".
La misma fuente explicó que "este desarrollo se produce en el contexto de tensiones regionales y cambios que se están produciendo en el mapa de alianzas globales", subrayando que el interés de Rabat en este tanque coreano llega en un momento en que Rabat busca mejorar sus capacidades militares para enfrentar estos desafíos, especialmente a la luz de la tensa frontera de Marruecos con Argelia, que posee un importante arsenal de armas rusas, incluidos tanques T-90.
El sitio web especializado destacó que los tanques K2 Black Panther, desarrollados por Hyundai Rotem, entraron en servicio en el ejército coreano en 2014. Se consideran un carro de combate de cuarta generación diseñado para dominar los campos de batalla modernos. Este vehículo militar pesa aproximadamente 55 toneladas, está equipado con un cañón de 120 mm y un sistema de carga automático capaz de disparar diez proyectiles por minuto.
El sistema de control de fuego del tanque, equipado con un telémetro láser, le permite alcanzar objetivos militares a una distancia de más de 10 kilómetros. Señaló que «este tanque coreano cuenta con un blindaje robusto que le proporciona una sólida protección contra misiles antitanque y fuego de artillería enemigo. Además, está propulsado por un motor diésel de 1.500 caballos de fuerza, con una velocidad máxima de 70 kilómetros por hora en carreteras normales y 50 kilómetros por hora en carreteras y terrenos accidentados».
Al comparar las características del tanque con las de otros carros de combates del mundo, señaló que «el tanque coreano supera a sus homólogos estadounidenses, como el Abrams, en muchos aspectos, especialmente en consumo de combustible. También supera al Leopard alemán en su sistema automático, y al T-90 ruso en guerra electrónica y sistemas de comunicaciones de campo».
Explicó que “el uso por parte de Marruecos de esta arma coreana no genera preocupaciones en Washington, que mantiene fuertes vínculos con Seúl, sobre todo porque esta pieza es totalmente compatible con los sistemas de la OTAN”. Destacó que el avance de Marruecos con este acuerdo abre el camino para otros países africanos, fortaleciendo así la influencia de Corea en el continente.
Por su parte, el sitio web Global Defense News destacó que el tanque K2 cuenta con un sistema de combate que permite ajustar la altura e inclinación del casco para mejorar los ángulos de disparo. También le permite cruzar barreras de agua de hasta 4,1 metros de profundidad mediante un sistema de snorkel. Seúl ha desplegado más de 260 de estos carros dentro del 7º Cuerpo Mecanizado de sus fuerzas armadas, agregó el informe.
Global Defense News señaló que este tanque coreano es utilizado por numerosos ejércitos en todo el mundo, comoe "Polonia firmó un contrato para comprar 180 unidades del mismo en 2020, con un plan para producir 820 unidades adicionales a nivel nacional", y agregó que el precio de un tanque asciende a más de 8 millones de dólares estadounidense