Paso histórico
Netanyahu asegura que Israel tomará el control de toda Gaza
"Tenemos unos combates intensos, enormes, y está habiendo progresos. Vamos a tomar el control de todas las zonas de la Franja", asegura el primer ministro
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, publicó un vídeo ayer en el que explicaba el plan para hacer llegar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza después de que nada haya entrado por los pasos desde principios de marzo, hace casi tres meses, por prohibición israelí. El domingo, el Ejército anunció que la ofensiva en Gaza, llamada «Carros de Guideón», había dado comienzo. Su objetivo es desarticular a Hamás, en su capacidad gobernativa y militar, y devolver a los 58 rehenes que aún están cautivos en la Franja, de los cuales se estima que tan solo 20 permanecen con vida. En su vídeo, publicado en su canal privado de Telegram, el mandatario israelí afirmó que su orden de permitir la ayuda se produjo después de que «nos acercáramos a la línea roja» y que el apoyo internacional a Israel se estaba viendo afectado por los informes de hambruna en la Franja. «Para completar nuestra victoria, derrotar a Hamás y liberar a los rehenes, no podemos llegar a una situación de hambruna. No nos apoyarán», añadió, dirigiéndose a sus críticos, tanto de la coalición de Gobierno como de fuera que le reprochaban haber cedido en este punto.
Así, la reanudación de ayuda a la que se ha visto obligado es para continuar con la ofensiva militar, aclaró Netanyahu, a pesar de que los centros de distribución protegidos por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), diseñados para mantener la asistencia fuera del alcance de Hamás, aún no están listos. Hasta que se establezcan los centros de distribución, el primer ministro afirmó que Israel debe proporcionar una ayuda mínima al enclave y evitar así la hambruna masiva. «Senadores que conozco como partidarios de Israel (...) vienen a mí y me dicen: ‘Les daremos toda la ayuda que necesiten para ganar la guerra, pero no podemos recibir imágenes de hambruna [en Gaza]’», dijo.
El ministro de Finanzas, Betsalel Smotrich, defendió la política del Gobierno en Gaza de las críticas de sus partidarios en una conferencia de prensa ayer. «No se permitirá ninguna ayuda a Hamás. Punto». Llamó mentiroso a cualquiera con una opinión distinta a esa. «Habrá una entrada –la que la realidad exige– de un nivel mínimo de alimentos y medicinas para la población civil de Gaza, pero nada irá a Hamás». Smotrich afirmó que, respecto a la nueva ofensiva, «el enfoque es completamente diferente a todo lo del pasado. Se acabaron las incursiones y las operaciones de entrada y salida; ahora conquistamos, limpiamos y nos quedamos. Hasta que Hamás sea destruido. En el proceso, lo que queda de la Franja también está siendo aniquilado, simplemente porque todo allí se ha convertido en una gran ciudad del terror».
Afirmó también que las FDI no escatiman esfuerzos en ayudar a la población a llegar al sur de la Franja y, «desde allí, con la ayuda de Dios, se trasladarán a terceros países según el plan del presidente Trump. Esto supone un cambio en el curso de la historia. Nada menos. Esa es la esencia». Según el ministro, el ejército está librando una campaña contra el Gobierno civil de Hamás, no solo contra su infraestructura militar. «Estamos eliminando ministros, empleados, cambistas y figuras clave del aparato económico y administrativo de Hamás», declaró. «En unos días, con la ayuda de Dios, una empresa civil estadounidense comenzará a operar en la Franja para distribuir la ayuda alimentaria mínima directamente a los civiles, garantizando que ni un solo grano llegue a Hamás ni ponga en peligro a nuestros soldados».
Reparto humanitario
Netanyahu explicó que Israel permitió inicialmente una ayuda
mínima a Gaza durante la guerra, pero detuvo las entregas tras descubrir que Hamás estaba desviando suministros. En coordinación con Estados Unidos, Israel ha adoptado un nuevo método de distribución que incluye centros de ayuda protegidos por el Ejér-cito, para impedir que Hamás acceda a los bienes y permitir que contratistas estadounidenses supervisen la distribución.
La Fundación Humanitaria para Gaza (FGH), la organización dirigida por Jake Wood, veterano del Ejército estadounidense que fundó y dirigió el Equipo Rubicón, que ha brindado ayuda humanitaria durante desastres naturales, y cuya sede está en Suiza, es la encargada de poner en práctica la misión. Ayer comunicó que acogía «con satisfacción el anuncio del Gobierno israelí de reanudar la ayuda a Gaza, en consonancia con el compromiso adquirido con nosotros de servir como puente hasta que la esté plenamente operativa» y añadió que «las necesidades sobre el terreno son urgentes y no hay tiempo que perder».