Lucha aérea

La insólita revelación del Pentágono sobre el error de un piloto ruso que estuvo cerca de provocar un gran desastre en el Mar Negro

Los documentos clasificados del Pentágono difundidos arrojan detalles sobre un incidente entre un Su-27 de Rusia y un avión de espionaje británico cerca de Crimea

 Un caza Su-27 ruso como el que ha impactado con el dron estadounidense
Un caza Su-27 ruso como el que ha impactado con el dron estadounidenseDe Mike Humphreys, U.S. Army - http://www.defenseimagery.milDe Mike Humphreys, U.S. Army

Una mezcla de buena suerte y una dosis de error humano evitó un incidente aéreo de grandes dimensiones entre Rusia y Reino Unido en el Mar Negro el año pasado. En 29 de septiembre de 2022 un avión de reconocimiento estratégico Boeing RC-135W Rivet Joint de la Real Fuerza Aérea Británica realizaba una misión de patrulla cerca de Crimea, en el espacio aéreo internacional, cuando se encontró con dos aviones rusos Su-57.

Según revela uno de los documentos filtrados desde el Pentágono -supuestamente difundido por un militar estadounidense-, el episodio se produjo porque uno de los pilotos rusos entendió mal una orden recibida desde tierra. Fue así como acabó disparando deliberadamente un misil aire-aire contra el avión espía británico. El proyectil no funcionó correctamente debido a un defecto no especificado y el avión británico se libró del impacto.

El ministro de Defensa británico Ben Wallace informó en octubre de lo sucedido. De no ser porque el arma falló, según los documentos que obran en poder del Pentágono, Rusia habría podido derribar un avión militar de Reino Unido en un ataque definido por un funcionario de Defensa de Estados Unidos como "realmente aterrador".

The New York Times ha publicado esta semana los datos recogidos en los documentos clasificados sobre este incidente, según los cuales el RC-135 británico escuchó comunicaciones interceptadas entre un controlador de radar ruso en tierra y el piloto de uno de los Su-27 enviados para interceptar el avión espía frente a la costa de Crimea. Los Su-27 no estaban dentro del alcance visual del RC-135, pero estaban equipados con misiles aire-aire.

En ese momento, uno de los pilotos del Su-27 interpretó mal una instrucción de un operador de radar en tierra y pensó que tenía permiso para disparar al RC-135. El piloto ruso logró fijar un misil en el avión británico y luego disparó, pero el “misil no se lanzó correctamente”.

Se desconoce realmente si los datos revelados en la filtración son ciertos o están manipulados, como ha sugerido el gobierno británico. Pero lo que sí es seguro es que el ministro británico Wallace habló con el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, y le expresó su preocupación. Moscú determinó que el lanzamiento del cohete se debió a un fallo técnico y reconoció que el incidente tuvo lugar en el espacio aéreo internacional. Tras este episodio, los aviones de reconocimiento ingleses RC-135W Rivet Joint siguen patrullando pero lo hacen escoltados por cazas de la Royal Air Force.

Choca con un drone de EEUU

El pasado mes de marzo, un avión de combate ruso Su-27 chocó con un dron militar estadounidense sobre el mar Negro, lo que provocó que el dron se precipitara sobre el mar, según el Ejército estadounidense. Varias veces antes de la colisión, el caza Su-27 arrojó combustible y voló muy cerca del drone MQ-9 de "una manera imprudente, poco profesional y poco ecológica", demostrando "una falta de competencia además de ser inseguro y poco profesional", según las autoridades militares de EEUU.