Polonia
Polonia compra más oro que China: las razones dan que pensar
En un mundo donde el orden financiero global muestra señales de transformación, Polonia ha decidido apostar fuerte por el metal precioso
Los bancos centrales siguen apostando por el oro y, una vez más, las cifras sorprenden. En el tercer trimestre del año, las autoridades monetarias de todo el mundo elevaron sus reservas en casi 220 toneladas, un aumento del 10% respecto al mismo periodo del año anterior y un 28% más que en el trimestre previo. En total, según datos del World Gold Council, las compras acumuladas en lo que va de año rondan las 630 toneladas. Aunque el volumen está algo por debajo del registrado en los últimos ejercicios, continúa siendo claramente superior a la media de entre 400 y 500 toneladas anterior a 2022.
En este contexto, emerge una tendencia llamativa: el círculo de países compradores se amplía. Tras años en los que las economías emergentes lideraron la acumulación —con Rusia, China e India habitualmente en los primeros puestos, e incorporaciones frecuentes como Turquía, Kazajistán y Uzbekistán—, ahora varios Estados de la Unión Europea están incrementando sus reservas. La motivación sigue siendo la misma: estabilizar sus monedas, diversificar las reservas de divisas y reducir la dependencia del dólar, un fenómeno conocido como “desdolarización”. Este impulso cobró especial fuerza tras la invasión rusa de Ucrania en 2022, cuando las potencias occidentales congelaron las reservas internacionales de Rusia.
Polonia lidera las compras
Chequia ha destacado recientemente, situándose entre los cinco principales compradores de oro en 2023 y 2024. Este año ocupa el sexto puesto, con casi 16 toneladas adquiridas. Sin embargo, el protagonismo recae en Polonia. El país europeo ha comprado casi 67 toneladas en lo que va de año, más que cualquier otro país del mundo. En 2024, sus adquisiciones alcanzaron cerca de 90 toneladas, casi el doble que China, lo que le valió el primer puesto global. En 2023 ya había ocupado la segunda posición con 130 toneladas.
El ritmo de compras ha catapultado las reservas polacas: desde 2023, se han más que duplicado y ascienden ahora a unas 515 toneladas. Esto sitúa a Polonia en el décimo lugar mundial, por detrás de los Países Bajos, pero por delante de economías como el Reino Unido o España.
Pese al fuerte incremento, las autoridades polacas aseguran que aún queda camino por recorrer. A principios de septiembre, el banco central anunció su objetivo de mantener a largo plazo alrededor del 30% de sus reservas de divisas en oro. Actualmente, la proporción ronda el 24%, lo que implicaría comprar unas 150 toneladas adicionales al precio actual.
“El oro es el único activo seguro para las reservas estatales”, afirmó el presidente del banco central, Adam Glapiński, en un comunicado oficial, justificando la estrategia de compras en un escenario global inestable.
Las razones detrás de la apuesta
Glapiński profundizó en la estrategia en un artículo publicado en 2024, donde enfatizó la relevancia geopolítica del oro. Según explicó, la situación internacional y las posibles amenazas futuras para la seguridad económica y militar del país, sumadas a la propia historia de Polonia, obligan a estar preparados para cualquier escenario.
El banquero central destacó que, a diferencia de las divisas tradicionales, el oro no está sujeto a las decisiones de política monetaria de otros bancos centrales ni a una expansión ilimitada de su oferta. Además, subrayó que unas reservas de oro significativas fortalecen la confianza en la moneda nacional y en la autoridad monetaria.
Aunque el gobernador del banco central polaco no mencionó explícitamente a Rusia ni al elevado endeudamiento estadounidense, sus declaraciones sugieren un contexto geopolítico cambiante y una búsqueda activa de protección frente a riesgos sistémicos. En un mundo donde el orden financiero global muestra señales de transformación, Polonia ha decidido apostar fuerte por el metal precioso.