Agresión sexual

Trump y su arte de convertir cualquier revés en el arma perfecta

Condenado por agresión sexual, es el favorito en las filas republicanas

Former President Donald Trump speaks at the National Rifle Association Convention in Indianapolis
El expresidente de EE UU Donald TrumpMichael ConroyAgencia AP

En cualquier otro país y con cualquier otro exmandatario la dimensión política de un veredicto de culpabilidad por agresión sexual habría sido de magnitudes considerables, pero con Donald Trump todo es posible. Así que no es de extrañar que el expresidente siga siendo el candidato republicano favorito, a pesar de haber perdido una nueva batalla en los tribunales. Esta vez ha sido por agredir sexualmente a la escritora y experiodista Elizabeth Jean Carroll y difamarla posteriormente cuando Carroll reveló por primera vez el ataque sexual de Trump en unas memorias publicadas en 2019 bajo el nombre ¨What Do We Need Men For?¨ (¿Para qué necesitamos a un hombre?).

El expresidente ha repetido hasta la saciedad que ¨no conoce de nada¨ a su demandante, y que además ¨no es su tipo de mujer¨. Una contradicción probada con una foto en la que aparecen Trump y la escritora y el acusado confunde a Carroll con su exesposa, Marla Maples, con la que estuvo casado varios años. El jurado, compuesto por seis hombres y tres mujeres, no considera probado el delito de violación por el que también demandó Carroll, pero sí el de agresión sexual y difamación, por el que Trump ha sido condenado a indemnizar a la escritora con cerca de 5 millones de dólares. El expresidente recurrió el jueves por la noche el veredicto, y sus abogados aseguran que ¨van a ganar¨.

Este proceso ha sido posible gracias a un cambio en la normativa legal de Nueva York el pasado noviembre de 2022, cuando el estado aprobó la Ley de Supervivientes Adultos (Adult Survivor Act) que permitía a las víctimas de una violación mayores de edad que interpusieran una demanda contra su agresor aun cuando el tiempo máximo para emprender acciones legales hubiera expirado. Una de las primeras demandas fue precisamente la de la escritora Elizabeth Jean Carroll por unos hechos ocurridos en 1996 que ella misma relató en el juicio que duró 7 días y en el que se escuchó el testimonio de 11 testigos, todos ellos presentados por la acusación.

E. Jean Carroll, center, walks out of Manhattan federal court, Tuesday, May 9, 2023, in New York. A jury has found Donald Trump liable for sexually abusing the advice columnist in 1996, awarding her $5 million in a judgment that could haunt the former president as he campaigns to regain the White House.
E. Jean Carroll, center, walks out of Manhattan federal court, Tuesday, May 9, 2023, in New York. A jury has found Donald Trump liable for sexually abusing the advice columnist in 1996, awarding her $5 million in a judgment that could haunt the former president as he campaigns to regain the White House.John MinchilloAgencia AP

Por su parte, Trump no estuvo presente físicamente en ningún momento del proceso, y se utilizó una declaración jurada grabada en octubre del 2022 en su casa de Mar-a-Lago donde niega todos los hechos ocurridos hace 27 años. Carroll tenía una importante carrera profesional, en aquel entonces escribía en la sección de consejos de la reconocida revista Elle, tenía un programa propio en televisión llamado ¨Pregúntale a E. Jean¨, era dueña de una agencia de parejas y se había convertido en una de las primeras mujeres colaboradoras de la revista Playboy. Por eso, al cruzarse con Donald Trump en los grandes almacenes Bergdorf Goodman, éste la reconoció. ¨Oye tú eres la señora de los consejos¨, recordó Carroll que le dijo el exmandatario. ¨Y tú el magnate inmobiliario¨, le contestó ella. Trump le pidió que le acompañara a hacer unas compras para ¨una amiga¨, ¨fue una escena neoyorkina muy divertida¨, dijo la demandante. ¨Me encanta dar consejos y aquí estaba Donald Trump pidiéndome consejos para comprar un regalo¨.

Carroll recuerda que Trump se mostró amable y reconoce que en algún momento coqueteó con él, pero nunca imaginó que el encuentro acabaría así. El exmandatario cogió un body gris transparente y le pidió que se lo probara. ¨Pruébatelo tú¨, relata que le contestó en broma la escritora, y aunque no tenía intención de ver cómo le quedaba la prenda, siguió a Trump hasta el probador. ¨No me imaginaba lo que estaba a punto de ocurrir¨.

En el estrado, Carroll describió como el expresidente de EE UU la empujó contra la pared, cerró la puerta y la arrinconó en el probador a pesar de que ella trató de impedirlo. Finalmente le bajó las medias, le introdujo ¨sus dedos y luego su pene dentro de ella¨. La escritora asegura que ¨levantó la rodilla y lo empujé¨. Jean Carroll en ningún momento gritó o pidió auxilio, algo en lo que los abogados de Trump han hecho mucho hincapié y ella ha contestado siempre que ¨tenía demasiado miedo para gritar¨. Nada fuera de lo normal, según la psicóloga que trajo el equipo de la acusación para testificar en el proceso.

Carroll, de 79 años, aseguró no contar lo ocurrido por miedo y vergüenza. En el estrado dijo que había nacido en 1943, ¨soy miembro de la generación silenciosa. A las mujeres como yo se nos enseñó y se nos entrenó para mantener la barbilla en alto y no quejarnos¨.

Pero la escritora sí le contó lo ocurrido a dos amigas minutos después de los hechos. Ambas han sido testigos en este proceso civil. Una de ellas ha reconocido que recomendó no denunciar por las consecuencias que podría tener. Carroll le hizo caso, pero es consciente de que este terrible episodio ha marcado sus relaciones íntimas y personales.

¨Soy una persona feliz, pero soy consciente de que me he perdido una de las experiencias gloriosas de los seres humanos: estar enamorada de alguien, cocinar la cena con esa persona, pasear el perro juntos. Eso no lo tengo¨, aseguró subida al estrado. Además, según ella, tras la publicación del escándalo en su libro, la revista "Elle" rescindió su contrato antes de lo previsto sin ninguna explicación. El 18 de febrero de 2019, Carroll lanza un Twitter contando lo ocurrido: ¨Debido a que Trump ha ridiculizado mi reputación, se ha reído de mi apariencia y me ha arrastrado por el barro, después de 26 años, ELLE me despidió. No culpo a la revista. Fue el gran honor de mi vida escribir ¨Ask E. Jean¨. Culpo a @realdonaldtrump¨.

Aunque al menos 26 mujeres han acusado a Trump de conducta sexual inapropiada o agresión, esta es la primera vez que se sabe que el expresidente es legalmente responsable de agresión sexual y difamación.