Crítica de cine

«JACK REACHER»: Continuará...

Dirección: Christopher McQuarrie. Guión: C. McQuarrie y Lee Child. Intérpretes: Tom Cruise, Rosamund Pike, Richard Jenkins. Estados Unidos, 2012. Duración: 130 min. Thriller.

La Razón
La RazónLa Razón

No tienen por qué conocer al ínclito, hierático Reacher, ni tampoco haber leído alguna de las novelas, un auténtico torrente de títulos ya, escritas por Lee Child y que este tipo aparentemente inexistente protagoniza. En la que se presupone primera entrega de una larga y respetable nueva saga con un héroe antisistema atormentado por la vida y sus por lo común terribles circunstancias, al carismático y en plena forma Cruise (que también produce la cinta, confianza plena) le bastan un par de planos tras el potente arranque del filme para demostrar que, cuando quiere (y quiere casi siempre), sigue siendo el rey de la pantalla. Un pistolero acaba con la vida de cinco hombres y las pruebas apuntan a cierto preso. Durante el interrogatorio, el hombre enseña una nota, una sola frase, y ahí comienza lo bueno: «Buscad a Jack Reacher». Con Bourne y el mito taquillero a cuestas, McQuarrie demuestra saber lo que se traía entre manos y en qué actores confiaba la empresa: una historia con ecos del thriller justiciero de los años 70 y 80 (aunque las escenas de acción estén muy dosificadas, varias resultan brillantes), un malvado con la extraña, enigmática cara del director Werner Herzog y un bueno que no responde exactamente al patrón milimétrico protagonizado por esta estrella incombustible que ha sabido transformar la legendaria sonrisa en una amenazadora mueca. No hay historia de amor al uso, no hay final ni pasado, pero sí, con la venia de los espectadores, un venturoso futuro: a Child le queda en la guantera todavía un buen puñados de títulos y dicen que incluso mejores a este primer, oscuro e inquietante disparo.