Masajes sin conversación

La opción japonesa de "no me hables" en los salones de belleza

Una tendencia que se extiende a peluquerías, taxis, tiendas y restaurantes, para aquellos que pagarían por ahorrarse una charla trivial

La opción japonesa de "no me hables" en los salones de belleza
La opción japonesa de "no me hables" en los salones de bellezaFreepik

Las charlas de ascensor, las que mantenemos en un Uber, o en la sala de espera del médico, podrían considerarse Bien de interés cultural en España. Sin embargo, no todos opinan igual, o, por lo menos, no en Tokio. ¿Te imaginas que existiera un botón que te evitara hablar del tiempo cuando entras al ascensor y te encuentras con un vecino? De los inventores de la opción 'no bla bla' de BlaBlaCar, en la que el conductor no quiere hablar con el resto de ocupantes del coche, llega una segunda parte llamada 'no quiero que me hables mientras me das un masaje'. Sí, a muchas nos ha pasado que hemos ido a darnos un masaje relajante en el que nos hemos tirado las tres cuartas partes de la sesión hablando con el masajista. A algunas personas les parece bien y a otras, un desastre, puesto que un masaje relajante se trata, exactamente de eso, de relajarse.

Pues los japoneses, como siempre, se nos han adelantado. Las japonesas y sus secretos de belleza ya no es lo único que nos interesa. Y es que para no crear un momento incómodo han puesto a disposición de los clientes la opción 'no me molestes'. Y es que en ciudades tan masificadas como Tokio, en la que —además— cuentan con una estricta cultura de complacencia y saber estar, decir eso de 'déjame en paz' o 'no me apetece hablar' roza la descortesía más absoluta. Uno de los pioneros en este servicio es Hair Works Credo, un salón en el barrio Setagaya de Tokio, donde los clientes pueden elegir entre tres niveles de conversación: conversación normal, poca conversación o directamente sin conversación alguna. De este modo, el servicio permite a los clientes relajarse sin la presión de tener que hablar.

Takahiro Noguchi, propietario del negocio, lanzó el servicio kaiwa nashi (sin conversación) hace diez años, inspirado en la iniciativa que surgió en 2015 por parte de una cadena británica llamada Bauhaus y sus famosas 'sillas silenciosas', según declaraciones de las que se ha hecho eco el medio The Japan Times. Y es que mientras unas clientas esperaban de la experiencia capilar un encuentro con amigas o el momento ideal para charlar de temas varios; otras valoraron —y mucho— el silencio mientras se les cortaba el pelo.

La opción del silencio no solo se estila en los salones de belleza y se empieza a ver en otros sectores como taxis, tiendas y restaurantes. ¡Adiós a las conversaciones incómodas!