Barcelona
Cocina vasca, mar y creatividad
Sus orígenes están muy vinculados al mar, sus raíces son cien por cien vascas y su singularidad reside en la creatividad. El emblemático Bar Zeruko donostiarra aterrizó hace apenas dos meses en Barcelona con una propuesta muy similar a la originaria, pero adaptada al modus vivendi barcelonés.
«El Zeruko de San Sebastián es una bar de pinchos típicamente vasco con más de tres décadas de vida», recuerda Iñigo Galdoña, socio del establecimiento abierto en Barcelona, quien sin embargo destaca que, pese a que su esencia es la tradición gastronómica vasca, su carta es también un canto a «la innovación y la vanguardia a través de la elaboración de pinchos creativos o vacilones, como nosotros los llamamos, pero sin querer ser estrella Michelín».
Es este concepto culinario el que el Zeruko donostiarra ha desarrollado en las últimas tres décadas y el que ahora trata de transmitir a los barceloneses a través de su nuevo establecimiento en la Ciudad Condal. «El Zeruko de Barcelona mantiene la esencia del original pero es cierto que ha habido que cambiar un poco la logística del local y la forma de servir» para adaptarse a un nuevo escenario y un nuevo público.
«En San Sebastián, el restaurante consta de una barra enorme con un montón de pinchos, pero en Barcelona, se mantiene la barra, aunque más pequeña, y además hay una zona de taburetes con sillas altas y en la primera planta hay un salón con mesas con capacidad para 36 comensales y en cualquiera de estos espacios se puede comer cualquiera de nuestras tapas de carta», explica Galdoña, quien destaca que el establecimiento barcelonés lleva muy poco tiempo abierto y aún le queda mucho camino por recorrer. «En San Sebastián tenemos más de 90 referencias y aquí 43 y una selección de nueve pinchos en la barra, aunque en breve queremos llegar a la quincena», avanza el socio del negocio. «Además a la larga también queremos hacer un horario ininterrumpido de cocina desde las 12.00 horas hasta la medianoche», añdae.
El Zeruko es pura esencia y personalidad, y no únicamente por lo que se refiere a su oferta gastronómica, sino también en lo relativo a su ambiente y decoración, con clara ascendencia marítima. «El restaurante lo fundó el padre de Joxean Calvo, actual propietario, quien se dedicaba a la pesca y decidió vender el barco para abrir el restaurante con el mismo nombre», explica Galdoña, quien comenta que en consecuencia «la esencia básica del establecimiento es la mar». «Mucha madera, tonos claros, elementos decorativos marítimos y pesqueros como un ancla, nansas, redes, o imágenes de pesca y de Donosti» marcan la línea decorativa del restaurante, que combina toques «clásicos con otros modernos».
En cualquier caso, desde hace un par de meses Barcelona ha sumado a su oferta gastronómica un nuevo establecimiento en el que, como señala Iñigo Galdoña, poder «vivir la experiencia de lo vasco de verdad».
Dirección: Gran Via 654
Teléfono: 93 5005595
Horario: De lunes a sábado de 12.00 a 16.00 horas y de 20.00 a 00.00 horas
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