Rodaje

Mar Saura: «No noto la falta de trabajo»

Mar está más centrada ahora en su faceta de intérprete que de maniquí
Mar está más centrada ahora en su faceta de intérprete que de maniquílarazon

A sus 40 años, la actriz y modelo acaba de rodar con Benito Zambrano y graba la segunda temporada de «El Ministerio del tiempo»

Que Mar Saura es guapa es una afirmación que deja poco espacio a la duda. Lo mismo ocurre al decir que, a sus 40 años, esta actriz y modelo va sabiendo asumir el tiempo. Más centrada en su faceta de intérprete que de maniquí, espera el estreno en España de un mediometraje que ha rodado a las órdenes de Benito Zambrano, «The Beggining», donde comparte protagonismo con Sergio Peris-Mencheta. Ade-más, se encuentra grabando la segunda temporada de «El Ministerio del tiempo», la reconocida serie de Televisión Española a la que se acaba de incorporar con un personaje fijo.

Alejada de las actrices que afirman que a los cuarenta ya escasea el trabajo, ella niega tal circunstancia: «No lo he notado, para qué voy a mentir». Y añade: «Existen muchos papeles en una serie y muchos perfiles, por lo que se abarca todo tipo de edades». Y eso que Saura los ha bus-cado hasta fuera de España, pues en 2010 cogió las maletas y se fue a México a trabajar: «Trabajé para HBO e hice una campaña enorme con un eslogan que se llama “Vivir es increíble”; en Latinoamérica ha salido mucho en prensa y estoy encantada de cruzar el charco, pero siempre que trabajar allí no me suponga mucho tiempo».

Esto último lo dice por su faceta de madre de los pequeños Javier y Claudia, fruto de su matrimonio con el empresario Javier Revuelta, con quien mantiene desde 2005 una de las relaciones más estables del panorama «celebrity» patrio. «En la vida hay etapas que vas quemando y en la que te toca ser mamá es maravillosa», cuenta esta reconocida seriéfila, admiradora de ficciones como «The Good Wife» y «Scandal». «Estoy enganchada», confiesa entre risas.

Disciplinada en sus rutinas deportivas, se esfuerza en no dejarlo «porque suele costar mucho volver» y eso que no se lo toma como un sacrificio porque «cuando lo ves así pierde la gracia y no lo haces». «Hay que buscar esa mezcla que te divierta», matiza. Otra cosa es la dieta, porque ella es de la ley de «comer poco y a menudo pero de todo». Eso sí, las rutinas de belleza son sagradas para ella: «No hay milagros pero si hay constancia, se nota; todos los días, al levantarme, y por la noche, al acostarme, me cuido la piel», comenta como un mantra que a ella (a la vista está) le está dando muy buen resultado.