«Mom»: Madre a tiempo completo

A lo largo de los 30 años que Chuck Lorre lleva en la televisión, el guionista y productor nacido en el estado de Nueva York ha ofrecido a los espectadores los más diversos retratos de familias y grupos de amigos de todo el país. La madre divorciada de los noventa en «Grace Under Fire», la actriz veterana que vive sus peores momentos en «Cybill», la pareja opuesta que se casa en su primera cita con «Dharma y Greg». «Dos Hombres y Medio» y «The Big Bang Theory» también llevan su firma, dos producciones en las que la mujer no tenía un papel tan relevante como en sus primeras series. Hasta que Christy y Bonnie surgieron dentro de la mente del prolífico creador, padre de alguno de los personajes más peculiares de la comedia televisiva moderna.

Christy Plunkett es una joven madre soltera que decide tomarse en serio su vida, dejar por fin de lado las drogas y el alcohol y establecerse en la localidad californiana de Sonoma, donde trabaja como camarera en un restaurante y acude a las reuniones de Alcohólicos Anónimos. Todo son buenas intenciones, pero Christy no lo tendrá fácil. Deberá trabajar sirviendo alcohol, pero saber mantenerse alejada de él, conseguir que Roscoe, su hijo, sea un hombre de provecho y que su hija Violet sea capaz de tomar mejores decisiones que ella. Mientras tiene una aventura con su jefe, que es un hombre casado. Pero esto no es suficiente, y de repente regresa a su vida Bonnie, su madre, una mujer con los mismos vicios que ella y un carácter que deja bastante que desear. Y llega con la intención de quedarse.

Así que la buena de Christy deberá ser madre, hija, camarera, amante y adicta en recuperación a tiempo completo, tratando de mantener una existencia lo más común posible en la que la felicidad resida en las apacibles cenas nocturnas. Pero ya sea por culpa de los retoños, de las excentricidades de su madre o de ella misma, Christy deberá luchar día a día para conseguir aquello que desea. Para ponérselo difícil estará Luke, el novio de Violet, Baxter, su segundo ex marido y padre de Roscoe o Alvin, su padre, al que todavía no había tenido la oportunidad de conocer. Pero para echarle una mano, llorar sus penas o simplemente desahogarse, Christy contará con la ayuda de Marjorie y Regina, dos de sus compañeras de reuniones que se convierten rápidamente en amigas. O casi, porque Bonnie siempre está ahí para estropear los buenos momentos con algún comentario sarcástico.

A pesar de que, en su primera temporada, la serie de la CBS que en España emite TNT, puede resultar excesivamente ligera y algo previsible, en su segunda entrega la producción plantea historias más arriesgadas y es capaz de regalar grandes momentos al espectador, aunque no siempre son cómicos. La capacidad de los creadores de añadir dramatismo a las vidas de Christy y Bonnie no es precisamente lo que el espectador de una «sitcom» busca. Pero esto aporta veracidad a la historia, descartando una vida de color de rosa, haciendo de los personajes algo más creíble y real. Y cuando llegan los buenos momentos, a veces, éstos saben mejor, ya que el espectador ha podido comprobar que, tras las nubes, siempre es posible encontrar un rayo de sol.

- Lo mejor

Allison Janney en el papel de Bonnie Plunkett, en clara contraposición a los papeles serios y formales que hemos podido ver en «El Ala Oeste de la Casa Blanca» o «Masters Of Sex». Qué maravilla de vis cómica y qué bien que haya sido reconocida por ello.

- Lo peor

Los inicios, en los que sólo la frescura del personaje de Janney era capaz de acabar con cierta monotonía. Además, Anna Faris, en su primer papel protagonista, tarda en encontrarse con el personaje de Christy y parece incapaz de soportar los golpes que le aguarda el destino.