Sevilla

De Mena

Cuentan que nació en Córdoba, allá por 1923. Y acaba de fallecer, en El Puerto de Santa María (Cádiz), a los 95 años de edad. José María de Mena no fue un escritor o historiador al uso. Publicó su primera obra a los 23 años y escribía artículos para Archivo Hispalense con Don Santiago Montoto. Fue catedrático y director del Conservatorio Superior de Música de Sevilla, ciudad a la que entregó horas y horas de rigurosa investigación. Miembro de destacadas academias y colaborador habitual en la prensa local, a José María de Mena no se le ha reconocido suficientemente. Es mucho lo que le debemos los sevillanos. Existe un libro, entre los innumerables que le dedicó a la vieja Híspalis, donde aparece la Virgen retratada en un azulejo. Curiosamente, en algunas ediciones se puede leer «Nuestra Sra. de la Esperanza Macarena» y, en alguna otra edición, «Nuestra Sra. de la Esperanza de Triana». Gracias a esa obra, muchos sevillanos y lectores pudieron conocer de cerca las leyendas que dicha ciudad esconde. Un libro que está por encima de modas y novedades editoriales. Y que sigue vendiéndose, año tras año. Sus «Personajes sevillanos», «Curiosidades históricas y casos raros de Sevilla», «Sevilla, estatuas y jardines», «Calles de Sevilla», «Esta es Sevilla», «Conocer Sevilla», «Historia de Sevilla», forman un largo etcétera de dedicación y entrega a una ciudad. Lo que aquí llamamos «temas sevillanos» tuvo en José María de Mena, probablemente, uno de sus máximos exponentes. En total cuarenta y dos obras sevillanas. Por sus libros, los jóvenes de mi generación aprendimos a amar aún más a nuestra ciudad. Todo aquel que se precie como buen sevillano, debe tener en su casa, al menos, un libro de Don José María de Mena. Que Dios le tenga en su gloria.