Marín presiona con la bajada del impuesto de Sucesiones y Donaciones

PSOE y Ciudadanos llevan casi medio año tratando de concretar una reforma del impuesto de Sucesiones y Donaciones que no llega. Los dos partidos iniciaron estas negociaciones en una mesa de trabajo a principios de noviembre, y de momento lo único que hay es una rebaja a las explotaciones agrícolas que la consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, circunscribió recientemente a la «disponibilidad presupuestaria».

La rebaja del impuesto de Sucesiones y Donaciones no forma parte de las 72 medidas que pactaron ambos partidos para allanar el camino de la investidura de Susana Díaz el pasado mes de junio. Sin embargo, es una de las banderas económicas de la formación naranja.

Ciudadanos está perdiendo la paciencia. O al menos quiere escenificar que está perdiendo la paciencia. Su máximo dirigente en Andalucía, Juan Marín, reprochó a Díaz que ya no hay «excusas» para que no se module este tributo. Apuntó dos motivos. La marcha positiva de la economía –que atribuyó al acuerdo de estabilidad en la región, así como a la reducción en dos puntos de la tarifa autonómica de IRPF que propició Ciudadanos– y al aumento de la recaudación tributaria en los últimos meses. «¿Cuál es la excusa para no bajar el impuesto de Sucesiones y Donaciones?».

La pregunta quedó sin respuesta. Díaz adujo que su intención es hacer una bajada «redistributiva» de la carga fiscal.