Más de cuatro millones de medicamentos se dejaron de dispensar por las subastas

El modelo provocó que el gasto en fármacos se incrementara en los hospitales en 87 millones

Las subastas de medicamentos se implantaron en Andalucía en el año 2012 y una de las críticas más habituales hacia este modelo tiene que ver con el desabastecimiento en las farmacias. De hecho, según datos a los que ha podido acceder LA RAZÓN, entre febrero de 2017 y enero de 2018 se dejaron de dispensar más de cuatro millones de medicinas que habían sido prescritas por médicos. La selección de medicamentos ha vuelto a saltar a la actualidad tras conocerse que el Gobierno central contempla extender este sistema a toda España. De hecho, la medida se incluye en el Programa de Estabilidad 2019-2022 que acaba de remitir a Bruselas, a raíz de las recomendaciones que ha planteado la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef). La Junta, por el contrario, viene alertando de los efectos perversos de este modelo y se marca como objetivo su supresión, apostando más por la inclusión de la comunidad autónoma en una central de compras en la que participan la mayoría de los hospitales de España. Precisamente, el pacto de Gobierno suscrito entre PP y Ciudadanos contempla la eliminación de las subastas, que motivaron más de una pugna judicial entre los anteriores Gobiernos central del PP y autonómico socialista.

Si echamos la vista atrás, los datos son más abultados. Entre octubre de 2016 y septiembre de 2017 quedaron bloqueados más de 10 millones de medicamentos. Otra de las debilidades de las subastas es el coste que supone para las arcas públicas. En los años 2017 y 2018 este gasto se incrementó en más de 87 millones de euros en los hospitales públicos de Andalucía. Es decir, un 10 por ciento más. El número de medicamentos consumidos también aumentó en el mismo periodo, concretamente un 5 por ciento más.

Uno de los colectivos más combativos en este ámbito es la Asociación de Farmacéuticos de Andalucía (Afarán), que cifra la falta de medicinas en las farmacias en más del 50 por ciento. De hecho, los andaluces sólo pueden acceder a 533 medicamentos frente a los más de 10.000 que están disponibles en otras regiones de España.

El consejero de Salud, Jesús Aguirre, hizo referencia ayer a este asunto en el Consejo Interterritorial de Sanidad celebrado en Madrid, alertando del «desabastecimiento» de fármacos a cuenta de las subastas y abogando por una «compra centralizada» por parte del Ministerio. Sobre la pretensión del Gobierno central, señaló que deriva de una «apuesta» propia de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, merced al citado informe de la Airef que él aún no ha leído. Aguirre insistió en que la mayoría de los problemas de desabastecimiento tienen que ver con los genéricos. «Si en una comunidad tan grande como Andalucía el medicamento genérico es de un solo laboratorio y el resto de firmas no apuestan por la región, en el momento en el que ese laboratorio se cae, no hay quien le sustituya», razonó.

Así, y a la espera de novedades por parte del Ejecutivo central, el consejero recordó que los problemas de la subasta de medicamentos se traducen además en «limitaciones» a los facultativos a la hora de la prescripción de fármacos o la «falta de adherencia» de los pacientes a los tratamientos como consecuencia de los «cambios» en el catálogo disponible.

Por eso, insistió en que en esta materia no corresponde que cada comunidad autónoma haga «de su capa un sayo», como hizo el anterior Gobierno andaluz del PSOE «durante muchos años». También señaló que Andalucía fue la única comunidad autónoma en implantar la subasta, con lo que «no debe ser tan buen» modelo si el resto de autonomías no han recurrido al mismo.

Extender las terapias contra el cáncer

El consejero de Salud, Jesús Aguirre, anunció que dentro de seis meses pedirá al Ministerio de Sanidad que el hospital Virgen de las Nieves y el universitario Reina Sofía se unan al Virgen del Rocío para poder aplicar las técnicas avanzadas CAR-T contra el cáncer.

Al finalizar el Consejo Interterritorial de Salud, Aguirre aseguró que Andalucía, una comunidad muy extensa y con 8,5 millones de población y con la ratio de los pacientes que se «van a favorecer» de esas terapias, más la evolución que el tratamiento va a tener para otras patologías, «se queda chica con un único hospital de referencia»: el universitario Virgen del Rocío de Sevilla.