Andalucía

Ventajas e inconvenientes del «apoyo sin sillones»

C’s abordará en la asamblea de febrero un cambio de estatutos para entrar en gobiernos de coalición a partir de la próxima legislatura

El líder andaluz de C’s, Juan Marín
El líder andaluz de C’s, Juan Marínlarazon

C’s abordará en la asamblea de febrero un cambio de estatutos para entrar en gobiernos de coalición a partir de la próxima legislatura

Ciudadanos no se plantea entrar en el Ejecutivo andaluz en esta legislatura. El líder andaluz de esta formación, Juan Marín, insistió en este asunto ayer en una entrevista en Canal Sur Radio. Sin embargo, a partir de la IV Asamblea General que celebrará Ciudadanos el próximo cuatro de febrero, la hoja de ruta puede cambiar. En ese cónclave se abordará una reformulación en los estatutos para abrir la posibilidad de entrar en gobiernos de coalición. Ese paso se haría efectivo, en cualquier caso, a partir de las siguientes elecciones municipales y autonómicas, que por calendario en Andalucía tocan en 2019.

En Ciudadanos hay un debate interno sobre los pros y los contras de entrar a formar parte de los gobiernos a los que apoyan, como es el caso de la Junta de Andalucía o la Comunidad de Madrid. En un primer momento la estrategia ha funcionado porque C’s ha trasladado un mensaje oportuno en tiempos de necesaria regeneración. Esto es, que la estabilidad y la voluntad de llegar a acuerdos están por delante de los sillones. Sin embargo, esta decisión tiene también sus inconvenientes. Dos en concreto son los fundamentales.

El primero es la menor visibilidad. La proyección de Juan Marín como el portavoz de un grupo de nueve diputados no es la misma que si fuera vicepresidente de la Junta y responsable de una consejería, como lo fue Diego Valderas (IU) en la anterior legislatura, que acabó con un abrupto adelanto electoral.

El segundo inconveniente está relacionado con la labor de fiscalización como oposición. Hay mucha información que no llega a los partidos si están fuera de los órganos de decisión. En Izquierda Unida suelen repetir el mismo ejemplo. Esta formación se pudo apuntar el tanto de haber parado la decisión de la Junta de pagar las defensas de altos cargos imputados en «la trama de los ERE» porque estaban representados en el consejo rector de la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA). La Junta pretendía suscribir un acuerdo comercial con dos aseguradoras por valor de 900.000 euros para correr con los gastos de asistencia jurídica de directivos y miembros del consejo rector imputados por la jueza Alaya, pero tuvo que dar marcha atrás.

«Ahora cumpliremos con lo que dijimos, porque es necesario ser fiel a lo que uno se ha comprometido y a partir de ahí, cuando nos presentemos a las próximas elecciones, cuando nos subamos a un atril en campaña electoral, se le pueda decir claramente a los andaluces ‘miren ustedes, nosotros sí entraremos en el gobierno si nuestros programas son coincidentes con otras formaciones políticas’», argumentó Marín.

Ideal de Granada publicó recientemente que el PSOE andaluz había sondeado a Ciudadanos sobre la posibilidad de que este partido entre a formar parte del Gobierno de Susana Díaz. Sin embargo, el portavoz del Gobierno autonómico, Miguel Ángel Vázquez, negó ayer este extremo. No obstante, Marín señaló que sí ha hablado con el vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, sobre el nuevo marco que se abrirá en Ciudadanos a partir del cambio de estatutos en la IV Asamblea General.