Política

Valladolid

Carnero destina 73 millones a la mejora de 1.430 kilómetros de carretera en Valladolid

El presidente de la Diputación presenta la nueva Estrategia Viaria que será vigente hasta el 2031

El presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, presenta la Estrategia Viaria Provincial 2019-2031 junto al alcalde de Camporredondo, Jesús María Criado, y el diputado del Área de Cooperación y Asesoramiento a Municipios y alcalde de Viana, Alberto Collantes
El presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, presenta la Estrategia Viaria Provincial 2019-2031 junto al alcalde de Camporredondo, Jesús María Criado, y el diputado del Área de Cooperación y Asesoramiento a Municipios y alcalde de Viana, Alberto Collanteslarazon

Más de 73 millones de euros. Esa es la cifra que destinará la Diputación de Valladolid, con su presidente, Jesús Julio Carnero, al frente, para la mejora de los más de 1.430 kilómetros de carretera de la provincia.

Así lo aseguró Carnero durante la presentación de la nueva Estrategia Varia, que estará vigente hasta 2031, y de la que destacó su «valor económico y social por ser estas vías un elemento vertebrador y fundamental de nuestros pueblos».

Con motivo de su visita a la actuación realizada en Camporredondo a lo largo de cinco kilómetros en la VP-223, que une Santiago del Arroyo y Montemayor de Pililla, el presidente de la institución provincial explicó que la Estrategia consta de cuatro programas de modernización, conservación ordinaria, extraordinaria y cesiones de vías a núcleos urbanos.

«Las infraestructuras condicionan el desarrollo de un territorio y su creación y mejora unen al factor económico de las empresas y empleos relacionados con ellas el componente social. Gracias a la existencia de buenas comunicaciones se puede acceder a servicios como los educativos y la Sanidad y eso aumenta la calidad de vida de los habitantes en los pueblos», afirmó.

Asimismo, el presidente provincial indicó que la Estrategia tiene un periodo amplio de actuación «por que lleva tiempo planificar el futuro de las infraestructuras para seguir dando oportunidades al mundo rural». Igualmente, subrayó que la inversión se lleva a cabo cuando «la crisis ha ido cediendo y permite destinar más recursos, sobre todo a mantener el buen estado de las carreteras».

Por ello, la Diputación ve necesario realizar una serie de intervenciones como dotar de mejor trazado y mayor ancho a aquellas vías que hayan incrementado su intensidad de circulación; renovar la capa de rodadura de aquellas que se han deteriorado; corregir las curvas que proceden de antiguos trazados y dar prioridad a las variantes de travesías en las que la anchura de calzada hace imposible el cruce de coches.

Además, las carreteras se dividirán en tres categorías: las de Clase A serán aquellas con un tráfico superior a 500 coches al día y un largo recorrido que da acceso a un gran número de poblaciones y tendrán por ello un nivel de conservación máximo con una anchura de ocho metros; las de Clase B serán las de escaso tráfico y longitud cuya anchura deberá ser siempre de siete metros; y el resto serán los trazados muy locales, un total de 339 kilómetos, que podrán ser traspasados a los núcleos urbanos en los que están enclavados.