Literatura

Castilla y León

Luis Antonio de Villena lleva hoy a Valladolid «Mamá», su delirio y amor materno-filial

Tambien presenta su última obra “El exilio del rey”

Las caídas de Alejandría
Las caídas de Alejandríalarazon

«Una evocación, una plegaria. Una reflexión sobre el delirio y el daño del gran amor materno-filial, del que pocas veces se habla. Una reflexión, una oración y un amoroso saldo de cuentas». De esta manera presenta Luis Antonio Villena, una de sus obras más íntimas y sincera, «Mamá», publicado por Cabaret Voltaire, y que hoy presentará en Valladolid, en el marco de la Feria del Libro, junto con otra de sus obras recién salida de la imprenta «El exilio del rey». En conversación con LA RAZÓN, el escritor, poeta y ensayista madrileño reconoce que una madre sobreprotectora «es un tema raro en la literatura española» y a partir de estas páginas construye un diálogo donde va remomerando capítulos protagonizados por su madre y por él mismo.

«La muerte de mi madre fue un hecho muy natural, a los 91 años. Pero lo más terrible fue la orfandad en un hijo único y sin más familia, que siempre dependió en la vida corriente de ella», se sincera Villena, quien confiesa también que tuvo que enfrentarse a la «vida cotidiana y corriente de la que no sabía nada». A partir de ahí y de los sucesos vividos en carne propia concluye que «la vida ordinaria es destructiva y nos enseña la cantidad de gente aviesa y cruel que lo llena todo. No tenemos remedio, nos hemos condenado como especie. Una gigantesca vulgaridad a menudo malvada».

Es por ello que el escritor se muestra muy pesimista con la condición humana, pero también con la vida cultural española de la que afirma «es muy pobre en todas partes» ya que «vivimos el reino de los bárbaros (empezando por los políticos) y la gente, por malos planes de estudio, es cada vez más ignorante, más mediocre y además cada día peor educada. Un espanto».

Y en esta retahíla tampoco se salva el mundo de los jóvenes, de los que dice que son «sólo una minoría los que escapan a la zafiedad actual. Son incultos, mal educados por padres necios, salvo las pertinentes excepciones- y es que apenas tienen otra opción que ser tan zafios como sus mayores. De ahí viene bien el título de mi última novela que también presento», declara.