Valladolid

Más sombras que luces en un Día sin Coche que no contenta a casi nadie

Atascos, desconcierto y alguna que otra bronca entre conductores y policías locales marcan la jornada.

Dos policías locales de Valladolid explican a un motorista el motivo del cierre al tráfico de las calles del centro.
Dos policías locales de Valladolid explican a un motorista el motivo del cierre al tráfico de las calles del centro.larazon

Atascos, desconcierto y alguna que otra bronca entre conductores y policías locales marcan la jornada.

Si el objetivo del Día Mundial sin Coche es desincentivar el uso del automóvil como medio de desplazamiento y concienciar a la sociedad sobre las ventajas de moverse en bicicleta, a pie o en transporte público, la cita ha resultado un fracaso.

Y es que a pesar del buen tiempo en lo climatológico que reinó en toda la Comunidad, que podía ayudar a dejar el coche en casa, el seguimiento fue desigual. Además, los atascos y alguna que otra bronca entre conductores desconcertados que no sabían nada y policías locales que pagaban los platos rotos del cierre de calles céntricas al tráfico en las ciudades, especialmente en Valladolid -ya que no en todas se llevó a cabo esta medida-, marcaban una jornada que no ha contentado a casi nadie. En lo que sí coincidieron todas las capitales fue en no cobrar por subirse a los autobuses municipales para deplazarse por las ciudades.

De la misma forma, todas ellas organizaron numerosas actividades, entre culturales, lúdicas, deportivas y también reivindicativas, como en Segovia, donde se instaló temporalmente una zona ajardinada en los aparcamientos del barrio de San Lorenzo. En Soria, se celebraba una gincana en patines y bicicleta e incluso se impartían talleres sobre movilidad y seguridad vial, dirigidos especialmente a los más pequeños de cada casa. Y en Valladolid se celebraba una ruta ciclista por el casco histórico guiada. Ecologistas en acción denuncia el «rotundo fracaso» de esta jornada sin coche y lamenta la «falta de voluntad institucional» para sensibilizar a la ciudadanía sobre las ventajas de la reducción del tráfico motorizado. La organización ecologista considera que hay que llevar a cabo un mayor esfuerzo en las administraciones públicas para poner en marcha medidas «reales» que contribuyan a dotar a las ciudades de modelos de movilidad más saludables, sostenibles, eficientes y, sobre todo, inclusivos y respetuosos con el medio ambiente.