Acoso sexual

Barcelona crea un protocolo contra el acoso en discotecas

El sector del ocio nocturno se conjura para evitar agresiones y comportamientos irrespetuosos

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ayer en el acto contra el machismo
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ayer en el acto contra el machismolarazon

El sector del ocio nocturno se conjura para evitar agresiones y comportamientos irrespetuosos.

Evitar los precios diferenciados por sexo o limitar el acceso a personas con comportamientos irrespetuosos son algunas de las medidas que recoge el protocolo que impulsa el Ayuntamiento de Barcelona para luchar contra el acoso sexual en discotecas y festivales.

La alcaldesa, Ada Colau, anunció la puesta en marcha, a partir de este fin de semana, de lo que aseguró que es «un medida pionera» en España, y que el Ayuntamiento impulsó en nueve salas de ocio nocturno y tres de los principales festivales de música de la ciudad.

«No queremos que ninguna mujer, por el hecho de serlo, tenga que sufrir por su seguridad; queremos que puedan disfrutar del ocio nocturno», declaró la alcaldesa, en el acto de presentación de la iniciativa.

El protocolo, que da continuidad a los «estands antimachistas» instalados durante las fiestas mayores y en la zona de ocio del Front Marítim de Barcelona, se enmarca bajo el lema «No callamos» para visibilizar y dar respuesta a cualquier agresión sexual.

Colau aseguró que el ocio nocturno es otro de los ámbitos donde las mujeres sufren situaciones de acoso sexual o violencia, y subrayó que «es responsabilidad de todos ser proactivos y tener iniciativas que ayuden a visibilizar que no puede haber impunidad».

La concejala de Feminismos y Lgtbi, Laura Pérez, explicó que el protocolo establece «indicaciones claras sobre cómo actuar y qué hacer en caso de que se produzca una agresión sexual en el interior de los espacios de ocio nocturno».

Para ello, el Ayuntamiento ofreció formación al personal de las discotecas, con el objetivo de que conozcan qué es una agresión, cómo hay que atender a las víctimas, detectar al agresor o saber qué hay que hacer después de que se produzca.

Pérez detalló que la iniciativa también recoge «el compromiso de acciones preventivas», como evitar utilizar criterios discriminatorios o sexistas para acceder a la sala, por ejemplo, precios diferenciados por sexo o bonificaciones de bebidas sólo para mujeres.

El protocolo limitará el acceso a la sala a personas con actitudes irrespetuosas y obligará a evitar actividades que fomenten la desigualdad, como establecer códigos de vestimenta diferentes por cada sexo. Por ahora, se han sumado un total de nueve discotecas.