Barcelona, letra y música

Para que una ciudad sea realmente importante, primero, tiene que tener una canción con su nombre y, segundo, tiene que haberla cantado Frank Sinatra. Lo hizo con «New York, New York», con «L. A. is my lady» o con «A foggy day in London town». No, nunca cantó una canción basada en Barcelona, y eso es un demérito, pero sí lo hizo Dean Martin con «Belle from Barcelona», así que tampoco está mal. Muchos grandes artistas han encontrado inspiración en la Ciudad Condal. La más famosa, por supuesto, fue «Barcelona», de Freddie Mercury y Montserrat Caballé, pero es un poco trampa, porque se hizo muy a propósito para vender los Juegos Olímpicos. Sin embargo, muchos otros sí que encontraron en la capital catalana su genuina fuente de belleza.

Sondheim on my mind

Un ejemplo fascinante de esta Barcelona que se puede tararear lo encontramos en el musical «Company», de Stephen Sondheim. La obra narra la vida sentimental de un hombre que acaba de cumplir 35 años. Todos sus amigos están casados, pero él no encuentra ninguna razón para dar ese paso, sino es para tener «compañía». Mirando a sus amigos se dará cuenta de que hay diez mil razones para no pasar el resto de la vida con una única persona, pero no hay absolutamente ninguna para estar solo.

Al final del último acto, después de despertarse en la cama con una azafata, juntos cantan «Barcelona». Ella ha de marcharse a coger el Vuelo 18 a Barcelona y él pide, para que no crea que ha sido cosa de una sola noche, que se quede. Después de repetir ocho veces el nombre de la Ciudad Condal, ante la sorpresa confusa de él, la azafata acepta y le abraza en la cama. «¡Oh, Dios!» canta aterrorizado. La pieza es una balada emotiva en que se entrecruzan la fragilidad de ambos amantes. Podría llamarse «Bruselas» o «París» y la canción sería igual, pero se llama «Barcelona» y es una maravilla. Para quien quiera comprobarlo en Youtube hay un excelente montaje con Neil Patrick Harris y Christina Hendricks protagonizando la escena.

De Wainwright a Jewel

El jazz ha sido el que más ha puesto sus ojos en la capital catalana, desde el saxofonista Joe Henderson y su genial «Barcelona» a Gizzy Gillespie que hizo una versión innolvidable de una composición de Alexander Galfa de mismo título. La guitarra de Derek Bailey también se inspiró en la ciudad gaudiniana, así como el piano blues de Myra Melford.

Dentro del pop destaca la balada de Rufus Wainwright llamada, como no, «Barcelona», así como la canadiense Jewel que puso su gran voz cercana al country al servicio de esta ciudad. Leonard Cohen menciona Barcelona en «The Traitor» y The Rentals también quisieron homenajear a la ciudad. Por último, hay que contar anécdotas como la protagonizada por la ex Spice Girls Mel C o el presentador de televisión John Tesh. Dentro de este apartado también destacan los grupos que utilizan la capital catalana para nombrar sus formaciones, como los suecos I'm from Barcelona y su pop juguetón o los estadounidenses Barcelona, con su rock independiente. Además, está Alan Parsons Project y el disco que dedicaron a Gaudí. El rock combativo de Manu Chao, el rap de Ricky Hill o el Drum & Bass de D. Kay & Epsilon también le han dedicado canciones.

En el apartado local, por supuesto, los ejemplos son más numerosos, desde «Barcelona tiene poder», de Peret, popularizada por Los Manolos a «Barcelona ciudad», de Loquillo. También habría que destacar la canción dedicada a las Ramblas de Quimi Portet. Los últimos en añadirse a este catálogo fueron Giulia y los Tellarini que en la banda sonora de «Vicky Cristina Barcelona», de Woody Allen.