Abusos a menores

Cinco niñas ratifican que sufrieron abusos de un monitor de Maristas

Los investigadores analizan el material informático decomisado en la casa del acusado

El centro de los Maristas de Les Corts siempre ha defendido su protocolo ante los presuntos abusos sexuales
El centro de los Maristas de Les Corts siempre ha defendido su protocolo ante los presuntos abusos sexualeslarazon

De momento, el caso de los presuntos abusos sexuales en dos centros de Maristas de Barcelona parece no tener fin. Cinco niñas, todas de once años, ratificaron el lunes en una declaración judicial que el ex monitor T.G. del comedor del centro de Sants las sometió a tocamientos, y que ocurrieron en la escuela.

Con estos nuevos casos, ya son numerosas las acusaciones de supuestos abusos sexuales referentes a personal que ha trabajado en los centros de Maristas. El principal inculpado es Joaquín Benítez, autor confeso de diversos abusos a menores, y que de momento está en libertad. Es la punta del iceberg deestos hechos. Incluso el arzobispado de Barcelona opinó, y pidió «mano dura» contra estos presuntos abusos. En la misma línea se expresó el Síndic de Greuges.

Explicaciones

Las menores lo explicaron ante la juez, fiscal, abogados y peritos de la dirección general de Atención a la Infancia (Dgaia), y constituirán prueba preconstituida para que no tengan que volver a declarar si el caso llega a juicio. Son muchos los presuntos abos sexuales acumulados, por lo que falta por ver lo que decide la Justicia a partir de ahora.

En lo referente a estas nuevas acusaciones, T.G. negó las acusaciones cuando los Mossos d’Esquadra lo detuvieron en diciembre, después de haberlo denunciado una de las familias supuestamente afectadas. Finalmente, el juez de guardia lo dejó en libertad con cargos, con una orden de alejamiento de las cinco niñas, y la prohibición de acercarse al colegio.

Los Mossos investigan también el material informático decomisado en su casa, con el fin de indagar si el acusado pudo haber mantenido contacto con las menores por otros canales más allá de los presuntos tocamientos en el centro educativo.

El acusado trabajó en el centro solamente durante 17 días, ya que el colegio «apartó al monitor el mismo día» en que se enteraron de los supuestos abusos, según explicó el director del colegio, Raimon Novell.

Los presuntos tocamientos se produjeron en el centro que los Maristas tienen en la calle Antoni Capmany de Sants, dedicado a la enseñanza de Infantil y Primaria. Esta investigación se realiza al margen del caso de los presuntos abusos cometidos en la escuela de los Maristas en la calle Vallespir.