Cataluña
El Mnac se aferra a los siglos XIX y XX
La Generalitat pidió una cosa a los actuales gestores del Museo Nacional de Arte de Cataluña (Mnac), que fueran ambiciosos. Comandados por Pepe Serra, el museo lo ha tomado al pie de la letra. El objetivo es que el equipamiento artístico crezca en el próximo lustro tanto en visitantes como en tamaño, colecciones, repercusión social, proyección internacional y foco turístico. La voluntad es que el Mnac sea un gran museo de museos, «un portaaviones» en palabras del conseller de Cultura, Ferran Mascarell, que sirva de dinamizador de todo el entramado cultural de Cataluña.
Ayer presentaron las líneas de actuación que marcarán el día a día del museo hasta 2017. Entre las novedades destaca la reconfiguración de la colección propia del museo, agrandando su influencia del románico hasta mediados del siglo XX. Precisamente, el arte del XIX y XX será el que sufra mayores cambios y a partir de 2014 se situará en la primera planta del museo para dotarle de mayor relevancia. «Tenemos mucho que hacer para explotar al máximo todo el potencial que tenemos y que configura una colección de más de 150.000 piezas», señaló ayer Serra.
De esta forma, se potenciará las salas dedicadas al modernismo, a la Guerra Civil, y al grupo Dau al Set. Paralelamente, en 2014 se realizará una exposición temporal con obras que llegarán a mediados de los años 70. También se quiere dar cabida a otros formatos como el cine, la arquitectura, las artes decorativas o el cartelismo. «No somos un centro exclusivo de pintura y escultura. Necesitamos crear nuevos relatos para explicar la historia reciente del arte catalán. Hemos de ser el referente del modernismo y decir que Gaudí sí está en el museo», recordó Serra.
La prioridad para poder realizar su ambicioso plan es crecer y todavía se está estudiando la fórmula para ocupar los dos pavellones de la Fira de Montjuïc. «Es imprescindible crecer y así además nos acercaríamos a la ciudad», dijo Serra.
✕
Accede a tu cuenta para comentar